Los Ministros de Educación y de Salud Pública dispusieron hoy el inicio de una jornada de vacunación a estudiantes, docentes y el personal administrativo de los centros educativos de las provincias fronterizas del país.
La medida tiene el propósito de prevenir enfermedades como la difteria y el tétano, además de revisar los protocolos de salubridad en las escuelas frente a cualquier otra afección en las comunidades más vulnerables a nivel nacional, según precisa una nota de prensa.
Indica que esta iniciativa se decidió en un encuentro entre los equipos técnicos de trabajo de las dos instituciones, encabezado por el ministro de Educación, Andrés Navarro, y la ministra de Salud, Altagracia Guzmán Marcelino.
Estrategias. Asimismo, durante la reunión se pasó revista a los avances de las estrategias de salubridad acordadas estas dos instituciones, a través del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE).
Estas incluyen acciones relacionadas con el reparto de los alimentos en la Jornada Escolar Extendida, diversos aspectos tangenciales que conciernen a las estancias infantiles y los esquemas de vacunación en las escuelas.
“Como medida inmediata de la actual coyuntura en el país, hemos determinado hacer jornadas de vacunación con un carácter preventivo, especialmente contra el tétano y la difteria en las escuelas de las provincias fronterizas, dirigidas a cuidar a nuestros estudiantes, los profesores y al personal administrativo”, dijo Navarro.
El funcionario destacó que, por recomendación del Ministerio de Salud Pública, se iniciará un programa de revisión para ubicar a los estudiantes que no disponen de su tarjeta de vacunación, situación que los puede convertir en agentes vulnerables frente a cualquier otra enfermedad contagiosa recurrente en todo el territorio nacional.
Precisó que se acordó establecer un protocolo para la revisión regular de las tarjetas de vacunación, bajo la coordinación de las direcciones provinciales de salud y las direcciones regionales y distritales del sistema educativo.
Expuso que “la idea es que los sistemas de salud y de educación actúen de manera conjunta con medidas preventivas para garantizar la calidad de la salud de la población más vulnerable que son nuestros niños y los adolescentes”.
Manifestó que las dos instituciones desarrollan un trabajo conjunto que permita, no solo una educación de calidad de los estudiantes a nivel nacional, sino, además, una sólida condición de salud.
En tanto, Guzmán Marcelino declaró que ambos equipos analizaron los esquemas de atención preventiva frente a todas las enfermedades inmuno prevenibles, tal como está contenido en el convenio Salud Pública-Inabie, “con énfasis, esta vez, en la protección contra el tétano y la difteria en todas las escuelas de la zona fronteriza”.