NEWTOWN, EEUU, (AFP).- Connecticut y el resto de Estados Unidos guardaron el viernes un minuto de silencio en homenaje a las 26 víctimas de la matanza en el colegio primario de Newtown de ese estado del noreste del país una semana atrás.

El minuto de silencio fue acompañado por 26 repiqueteos de campanas en iglesias y edificios públicos, en recuerdo de los 20 niños y seis adultos muertos en el ataque perpetrado por un joven de 20 años que luego se quitó la vida.

El gobernador de Connecticut, Dannel Malloy, hizo el llamamiento a este minuto de silencio a las 09H30 locales (14H30 GMT), la hora exacta del 14 de diciembre en la que Adam Lanza entró en la escuela Sandy Hook de Newtown tras haber matado antes a su madre en su domicilio.

«Unámonos para recordar la pérdida de tantas vidas prometedoras», dijo Malloy. «Aunque nunca sepamos la amplitud exacta del dolor experimentado por estas familias, podemos hacerles saber que estamos junto a ellos durante este difícil momento», agregó el gobernador.

El presidente Barack Obama también observó este minuto de silencio en la Casa Blanca, que había pedido a través de la red social Twitter que los estadounidenses se sumasen a este homenaje.

La página de entrada del sitio internet de la presidencia estuvo blanca durante algunos minutos. «20 niños magníficos y seis adultos remarcables. Juntos, continuaremos y obraremos de modo de que nuestro país sea digno de su memoria», indicó Obama en un tuit difundido en la cuenta de la presidencia.

Gobernadores desde Hawaii hasta Florida también convocaron a sus residentes a observar ese minuto de silencio a las 09H30 hora local en sus estados. Los más altos responsables religiosos estadounidenses se reunieron en la catedral nacional de Washington, que también hizo sonar 26 veces su campana mayor, utilizada para los entierros.

 Los religiosos pidieron a los responsables políticos «continuar tomando acciones rápidas con el objetivo de poner fin a la violencia armada y honrar a las vidas perdidas en Newtown», según un comunicado.

Obama, que luego de la matanza propuso buscar modos de reducir la violencia causada por las armas de fuego, respondió el viernes a un petitorio que reunió más de 400.000 firmas en el sitio internet de la Casa Blanca.

 «Desde la desgarradora tragedia de Newtown, Connecticut (noreste), cientos de miles de ustedes, de los 50 estados, firmaron peticiones pidiéndonos tomar serios pasos para abordar la epidemia de la violencia armada en este país», manifestó Obama en un video colgado en internet. «Hemos oído».

 De su lado, su esposa Michelle Obama envió una carta a las familias de la víctimas que fue publicada por un diario local de Connecticut, en la que manifiesta su dolor y solidaridad «en tanto que madre de dos niñas». «Sepan que a cada momento del día, pensamos en ustedes, rezamos por ustedes», escribió.