Mis Buenos Días
Doña María

Mis Buenos Días <BR><STRONG>Doña María</STRONG>

POR RAFAEL MOLINA MORILLO
De doña María Ugarte, Premio Nacional de Literatura 2006, tengo muy gratas impresiones. Ella llegó a la redacción de El Caribe cuando dicho periódico apenas gateaba, casi desde sus inicios. Cuando eso sucedió, ya yo estaba allí, pues fui uno de los mozalbetes sin experiencia periodística que reclutó Rafael Herrera para enseñarnos el segundo oficio más viejo del mundo.

Yo era reportero –en esa primera etapa estuve encargado de las noticias de la farándula- y desde que llegó doña María se ganó el respeto y el cariño de todos, de los novatos y de los veteranos, por su trato afable, ameno y profesional. Uno de sus inventos fue la página escolar, donde jóvenes con talento vieron publicadas sus incipientes creaciones literarias y poéticas, para luego convertirse en verdaderos valores de nuestra intelectualidad.

No voy a repetir aquí la ascendente trayectoria de doña María en el campo del periodismo, la investigación histórica y la crítica artística, porque de eso se han ocupado ya, mejor que yo, otros cronistas. Quiero testimoniar, eso sí, que esa dama fue, en aquellos años iniciales de El Caribe, el punto de apoyo fundamental en la formación de muchos profesionales importantes de nuestro parnaso literario y periodístico.

Hoy me sumo, como uno más de sus discípulos que le mantienen invariable el profundo cariño que ella ha sabido ganarse, al justo tributo que le rinde el país con el Premio Nacional de Literatura 2006, otorgado por la Secretaría de Estado de Cultura y la Fundación Corripio como reconocimiento a sus aportes al acervo cultural dominicano. ¡Enhorabuena, doña María Ugarte!

 (r.molina@verizon.net.do)

Publicaciones Relacionadas

Más leídas