Hoy 
RAFAEL MOLINA MORILLO
Anoche a las 12 se venció el plazo para obtener el marbete que hace las veces de placa, sin la cual los vehículos de motor no pueden transitar por las calles y ni las carreteras del país, so riesgo de severas sanciones.
Tengo los dedos cruzados para que la Dirección de Impuestos Internos no caiga otra vez en la debilidad de conceder prórrogas para los que hasta ahora no hayan cumplido con el deber ciudadano de pagar sus tributos. Y ello así, por dos razones: la primera, que seria injusto que los malos pagadores sean tratados con privilegios mientras los buenos ciudadanos andan en un patín para cumplir cabalmente con sus deberes. Y la segunda, para que los dominicanos comiencen a aprender que hay que ser puntuales en las fechas, en las horas y en los minutos.
Nada provoca más irritación que llegar a una reunión convocada para las 5, por ejemplo, y tener que esperar una hora o más hasta que vayan llegando, con toda su calma, los que siempre acuden tardíamente. A eso contribuyen los propios convocantes, porque suelen instruir a sus secretarias en esta forma: Dígales que vengan a las 4, porque así podemos comenzar a las 5.
Empecemos ya a ser puntuales. Nada de prórrogas. Ni para las placas, ni para nada. La una es la una, las dos son las dos y las tres son las tres. Respetemos el calendario y los relojes.
