RAFAEL MOLINA MORILLO
La columna de hoy es de denuncia. Tal y como me llegó, así la retransmito, por si alguna autoridad quiere corregir la anomalía. Dice así el amable lector que la plantea:
Después de extenderle mi más cordial saludo, le informo de una situación que conocí en el día de ayer (13-10-04), la cual me pareció muy extraña.
Trabajo en el área turística, en la zona de Bayahibe, y siempre compro sellos de correo para las postales que compran los turistas. Esta compra la realizo a una compañía privada, pero al momento de pagar me doy cuenta de que el costo de la estampilla subió de RD$26.00 a RD$34.00 los expresos.
Le dije, entonces, a la persona que vende los sellos, que me resultaría mejor comprar el sello económico de RD$15.00 a la oficina de
Correos más cercana, a lo que me respondió que con ese sello las postales no salen del país, que solo llegan las postales y la correspondencia con el que ellos venden, y que, además, ese tipo de estampillas no está a la venta al público, si no a esa empresa solamente, con carácter de exclusividad.
Entonces me digo que estamos desprotegidos, que el Estado realiza la tirada de esos sellos y se los pasa a una compañía privada, cuando es el Estado quien tiene la obligación de brindar ese servicio. Esta responsabilidad no se la estoy echando solamente a este gobierno, ya
que esta practica viene desde hace varios años, pero habrá que llegar a una de estas conclusiones:
A- Que el Estado no está en la capacidad de brindar este servicio. B- Que el Estado apoya el monopolio. C- Que no hay confianza en nosotros mismo, por los escándalos que sucedieron en tiempo atrás con este tema.
Hasta aquí, la denuncia. Quien tenga ojos para ver, que vea; y quien tenga oídos para oír, que oiga.
(r.molina@verizon.net.do) .