MIS BUENOS DIAS
¡Pobre Calderón de la Barca!

MIS BUENOS DIAS <BR>¡Pobre Calderón de la Barca!

RAFAEL MOLINA MORILLO
El profesor de literatura preguntó a sus alumnos quién escribió El Quijote. Desconsolado al comprobar que todos los estudiantes desconocían la respuesta correcta, el maestro exclamó: “¡Pobre Calderón de la Barca, cómo lo han olvidado!”.

Parafraseando al profesor del cuento, podríamos lamentarnos nosotros: ¡Pobre Mella! ¡Pobre Baltazara de los Reyes! ¡Pobres hombres y mujeres que lo dieron todo por legarnos un país y una patria dignos de mejor suerte! ¡Cómo los menospreciamos!

Digo esto al leer ayer la prensa dominguera. “El Nacional” nos cuenta que la casa donde nació el prócer Ramón Mella es hoy un bar y salón de billar. Esto ocurre, como dice el manoseado cliché periodístico, “ante la mirada indiferente de las autoridades”, porque tengo entendido que para abrir un café o instalar un billar es necesario obtener un permiso previo de alguna autoridad… creo yo!

El otro irrespeto viene consignado en la página que semanalmente dedica la colega Angela Peña a las calles de la capital. La entrega de ayer estaba consagrada a Baltazara de los Reyes, heroína de la Independencia de la República. En el rótulo de la calle que se ha dedicado a su memoria reza: “Baltazar de los Reyes”. ¿Habrán creído los autores de tal desmán, que se trata de un homenaje a Baltazar, el de los Tres Reyes Magos? No lo dudo.

Como esas, abundan muchas situaciones de afrenta a nuestro pasado histórico que sería oportuno comenzar a enmendar. Comencemos por rescatar la casa de Mella, continuemos por corregir decenas de rótulos mal escritos en las calles, y no paremos de buscar otras irreverencias hasta que las hayamos detectado todas.

r.molina@verizon.net.do

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