Mis buenos días
Que alguien se lo diga

Mis buenos días <BR><STRONG>Que alguien se lo diga</STRONG>

POR RAFAEL MOLINA MORILLO
Por si acaso el Jefe de la Policía, o el Fiscal del Distrito, o el Secretario de Medio Ambiente, no leen hoy esta columna, ¡por favor!, le ruego a cualquiera que pueda tener un acercamiento con alguno de ellos, que le diga cómo un establecimiento ubicado en la avenida Tiradentes esquina a la calle Rafael Augusto Sánchez, se burla de ellos, de la ley y de la supuesta campaña contra los ruidos abusivos en horas de la noche.

Con pelos y señales: el sitio se llama “Drinks to go” y desde que se instaló en el sitio señalado más arriba, la paz desapareció en el vecindario con varias cuadras a la redonda. Los clientes compran allí sus licores y se instalan en calles y aceras circundantes a beber y emborracharse en plena vía pública. No conformes con eso (que ya, de por si, es un atentado al pudor y a las buenas costumbres), llevan atronadoras bocinas y altoparlantes en sus vehículos, que ponen a sonar a todo volumen, como si quisieran romperle el tímpano a los desamparados residentes en el sector.

Ya los vecinos no pueden recibir visitas, no pueden sentarse en la sala de su casa a leer o a escuchar la música de su gusto, tienen que salir huyendo en busca de lugares más tranquilos hasta que sean las 12 de la noche o las 2 de la madrugada, para que la prohibición del romo entre en efecto… pero mientras tanto, no hay vida en ese sector.

¿Y la famosa campaña anti-ruidos? Bien, gracias. Algunos han llegado a pensar que, a lo mejor… bueno, que talvez… quien sabe… como, además de correr el alcohol, también correrá el dinero por ahí? Señor Jefe de la Policía, señor Fiscal del Distrito, señor Secretario de Medio Ambiente, no permitan que la gente pueda empezar a pensar mal. 

(r.molina@verizon.net.do)

Publicaciones Relacionadas

Más leídas