Mis Buenos Días
Nota luctuosa

<STRONG>Mis Buenos Días<BR></STRONG>Nota luctuosa

RAFAEL MOLINA MORILLO
Cuando salga a la luz pública, el domingo 27 de mayo del 2007, ésta será una nota luctuosa para la libertad de expresión y el derecho de la gente a recibir información sin cortapisas. Porque, en Venezuela, desde las 12 de la noche del sábado, habrá muerto por disposición oficial una voz independiente: Radio Caracas Televisión (RCTV).

Desde ayer sábado me encuentro en Caracas, encabezando una misión especial de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que ha viajado hasta la capital de la patria de Simón Bolívar para testimoniar su solidaridad y adhesión con el canal suspendido y con el pueblo venezolano que ahora se ve privado de una fuente de información que no decía lo que le conviene al gobierno, sino lo que consideraba que el público debía conocer.

Es un golpe duro para todo el continente, que contempla atónito hasta donde puede llegar la ambición política, en desmedro de los derechos ajenos. Junto a la SIP han viajado a Caracas, con el mismo espíritu solidario, otras entidades internacionales interesadas en la vigencia de los derechos humanos. Pero, a decir verdad, las esperanzas de que el presidente Chávez dé marcha atrás en su propósito de silenciar a RCTV, son muy pocas.

La delegación de la SIP la completan Gonzalo Marroquín, del diario Prensa Libre, de Guatemala, quien preside la Comisión de Libertad de Prensa; Alejandro Miró Quesada, de El Comercio, de Lima, ex presidente de la SIP; Julio Muñoz, director ejecutivo de la sociedad; y Ricardo Trotti, director de libertad de prensa de la msma. Pretendemos estar presentes en las instalaciones del canal, en el instante mismo en que deje de enviar sus señales al aire.

El momento es doloroso, pero no debe desanimar a los amantes de la libertad. Por el contrario, debe ser utilizado como un acicate para fortalecer nuestra lucha contra la intolerancia y los abusos de poder. Ahora, más que nunca, es el momento de unirnos todos en defensa de la libertad de expresión, para evitar que se repitan episodios tan ominosos como el que se producirá hoy en Venezuela.

(r.molina@codetel.net.do)

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