Hoy 
RAFAEL MOLINA MORILLO
A todos aquellos ex funcionarios a quienes les han sido detectadas grandes irregularidades en el ejercicio de su trabajo, la Cámara de Cuentas, en un alarde de generosidad y buen corazón sin precedentes en la historia de la Humanidad, les garantiza paz y tranquilidad? porque ya casi estamos en Navidad.
Así como se lee y se oye. Los sometimientos a la justicia y los castigos que merecen las grandes irregularidades encontradas en los papeles de los que manejaban la cosa pública, serán dejadas para después de la Navidad para llevar paz a los infractores.
No cabe ninguna duda de que los miembros de la Cámara de Cuentas que así actúan, irán derechito al Cielo, donde los espera San Pedro con las puertas abiertas de par en bar, al arrullo de un coro de ángeles y vírgenes que les darán la bienvenida. ¡Ave María Purísima, cuánta santidad en tan pocos jueces!
De seguir ese beatífico ejemplo, no se sorprenda nadie cuando un juez de lo penal, tras hallar a un reo culpable de haber asesinado a alguien, le diga: Te he encontrado culpable y te voy a condenar, pero no ahora, en vísperas de Navidad, sino después, para que pases tranquilo estos días y de paso te tomes tus traguitos en paz, sin preocupaciones.
Ni más ni menos. Ninguna diferencia entre un caso y el otro. Viole usted la ley ahora, y vuelva a buscar su sentencia después de las Pascuas!
