POR ENRIQUE GONZÁLEZ
La misión de observación de la Organización de Estados Americanos (OEA) velará por la transparencia en las elecciones congresuales y municipales de hoy. Los miembros de la delegación de este organismo, que llegaron el pasado 30 de abril, han trabajado durante esos 15 días para garantizar que se cumplan las exigencias de la ley electoral.

La delegación está compuesta por 84 funcionarios, 54 de ellos pertenecientes a la propia OEA y otros 34 voluntarios de las instituciones diplomáticas extranjeras que hay en el país.

Su labor durante todo el día de hoy se centrará en asegurarse de que los comicios transcurran en un clima de normalidad. Su jornada comienza en el mismo momento en  que se abren los colegios electorales y  termina cuando el proceso haya sido completado.

Fuentes de la OEA explicaron a Hoy que los observadores se distribuirán por los principales distritos electorales. Visitarán los colegios de las provincias de Santiago de los Caballeros, San Pedro de Macorís, La Vega, Puerto Plata, Azua, San Cristóbal, Distrito Nacional y Santo Domingo, entre otras.

La semana pasada visitaron la región de Pedernales para investigar el cambio de colegio electoral de varios votantes. Cualquier ligera variación que se produzca en las localidades de esta provincia podría cambiar el resultado final por el reducido número de votantes de esa demarcación.

La delegación de la OEA observará el desarrollo de la votación, el escrutinio, el cómputo de las actas y la transmisión y conclusiones de los resultados, así como el comportamiento de los candidatos.

A cada provincia se destinará un grupo de observadores, que estarán coordinados por un representante de la organización.

Los observadores tendrán una «hoja de ruta» en la que se especifica cuáles son los colegios que tienen que visitar. Una vez completado el recorrido, los delegados vuelven a examinar las escuelas en las que se realiza la consulta hasta terminar en la primera. Es decir, los grupos inspeccionan en dos ocasiones las sedes incluidas en su plan de acción.

Después de la clausura de los colegios, los observadores internacionales se encargan del cierre y sellado de las urnas, el recuento de las boletas y del monitoreo. Su trabajo no concluye hasta que todo el proceso ha finalizado. «Si es necesario, amanecemos en el colegio electoral», explicaron fuentes de la organización.

Durante el trayecto, cada uno de los observadores completa un documento en el que evalúa las condiciones de los colegios. Se analizan aspectos como el estado de las urnas, el control de los electores, el ambiente electoral, etcétera.

Cuando finaliza el día todos los delegados envían las conclusiones de sus documentos a una base de datos de la organización. Una vez que las elecciones han finalizado, se elabora un informe final con observaciones y recomendaciones para las próximas elecciones.

La  OEA evaluará los informes de las elecciones anteriores para determinar si se han cumplido las recomendaciones realizadas. De no ser así, el organismo emitirá un informe negativo.

La OEA ya ha mostrado su satisfacción por la organización de los comicios de hoy. Según fuentes del organismo, los controles que ejercen los partidos políticos sobre sus rivales en las urnas garantizan la transparencia y la rapidez en el recuento.