POR ENRIQUE GONZÁLEZ
La misión de observadores de la Organización de los Estados Americanos (OEA) señaló la falta de capacitación de los responsables de las mesas electorales como una de las principales deficiencias del proceso electoral en las elecciones legislativas y municipales celebradas el pasado martes.

El jefe de la misión del organismo internacional, Rubén Perina, destacó el pasado miércoles “la poca preparación observada en algunas autoridades de mesa”, entre las principales causas por las que se produce una importante demora en el escrutinio de las votaciones este año.

Esta tónica se mantuvo durante al menos los últimos cuatro procesos electorales celebrados en el país. El lento recuento de las papeletas o las dificultades para la validación de las actas provocaron el retraso de los resultados definitivos, tanto en los plebiscitos presidenciales como en los congresuales y municipales.  En las elecciones para la presidencia del año 2000, la OEA, junto a otras instituciones como el Centro Carter o la Fundación Internacional para Sistemas Electorales (FISE), destacó la transparencia de la consulta. Sin embargo, criticaron la escasa capacitación de los funcionarios de los colegios electorales, además de problemas en la elaboración del padrón o el retraso en la entrega de cédulas a los electores. Todas ellas, deficiencias también encontradas este año por los observadores internacionales.

Para los comicios de 2002 la misión de la OEA manifestó su satisfacción por la celebración de la jornada del 16 de mayo de ese año, pero de nuevo el retraso en el recuento de las papeletas y la “poca legibilidad de las actas”, aducida por la Junta Central Electoral, enturbiaron el proceso al demorar los resultados finales.

En los anteriores comicios presidenciales, en 2004, en los que salió elegido el actual presidente Leonel Fernández, los observadores de la OEA, dirigidos entonces por el argentino Santiago Murray, reiteraron la capacidad del país para organizar unas elecciones. Durante la jornada electoral el organismo reprobó la lentitud en la verificación de las actas y en el recuento de los votos, por la poca capacitación del personal encargado de elaborar el escrutinio. Ese año la OEA realizó un recuento paralelo para comprobar la veracidad de los datos.

Al parecer, las deficiencias producidas en los períodos anteriores se han vuelto a producir. Cuatro días después de la votación popular, continúa sin conocerse el resultado definitivo de los senadores y diputados que compondrán el Congreso de la República Dominicana durante los próximos cuatro años.