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El FMI dejó entrever ayer que está a las puertas de alcanzar un acuerdo de contingencia con la República Dominicana dirigido a ayudar al país caribeño a salir de una «fuerte desaceleración» en su economía, con su secuela de aumento del desempleo y pobreza. El anuncio se produce al concluir dos semanas de reuniones entre funcionarios del Gobierno dominicano y del organismo de financiación.
La misión del Fondo Monetario Internacional que vino al país a negociar un acuerdo con la República Dominicana emitió una declaración en la que atribuye a los efectos de la crisis económica global la reducción de las exportaciones, del turismo y de las remesas, factores que identificó como los que han precipitado la fuerte desaceleración de la actividad económica, el aumento del desempleo y un deterioro mayor en la situación de pobreza.
Los comisionados identifican también esas circunstancias como las que han redundado en la notable caída de los ingresos fiscales.
La misión espera que el (Producto Interno Bruto (PIB) real crezca entre 0.5 y 1.5% en 2009, después de su aumento a 5.3% en 2008.
Considera que la inflación se ha mantenido reducida porque una baja en la demanda interna de bienes y servicios, y espera que termine en el extremo bajo del rango de inflación del Banco Central de 6 a 7 por ciento para 2009.
La misión le reconoce al Banco Central haber reducido de manera oportuna las tasas de interés, con el objetivo de aumentar la liquidez y crear las condiciones para una expansión del crédito en la economía.
Sin embargo, señala que una fuerte reducción en las recaudaciones fiscales en conjunto, con un acceso limitado del gobierno a los mercados externos e internos de capitales (acentuado por la crisis financiera internacional), ha reducido sus posibilidades de llevar a cabo una respuesta fiscal adecuada, lo que ha exacerbado el ciclo económico.
Al mismo tiempo, la misión señala que existen algunos desafíos en el campo estructural, en particular en el sector energético, donde amplios subsidios no focalizados representan una carga onerosa sobre el presupuesto que ha reducido aún más la capacidad del Gobierno reaccionar ante la crisis.
En cuanto a las negociaciones de un posible acuerdo con el FMI, la misión, encabezada por Alejandro Santos, dijo que las discusiones han sido productivas y se han logrado avances importantes para llegar a un acuerdo stand-by. Explicó que los elementos esenciales del programa económico de las autoridades ya se han acordado, y se espera que el Gobierno concluya a la brevedad la redacción de la Carta. La misión regresará a Washington para finalizar el informe que será discutido ante el Directorio Ejecutivo del FMI. Los comisionados esperan que la conclusión del acuerdo sea una fuerza catalizadora para créditos provenientes de otras instituciones financieras internacionales.
El secretario de Hacienda, Vicente Bengoa, reveló el jueves que el Gobierno tiene lista la Carta de Intención para el pacto con el FMI, que le permitirá recibir este año US$990 millones del Banco Mundial y del BID, y US$300 millones por el FMI.
