Lo que se estila, en una comida formal, al menos al estilo tradicional, es elegir el tipo de vino para cada plato, considerando que hay uno específico para acompañar la entrada, otro para el plato fuerte, y otro distinto para los postres.

Nunca, o casi nunca, se empieza una comida con un vino afrutado; sin embargo, este mito fue desmontado por Jaime Boville García de Vinuesa, vicepresidente de Haciendas Company y sommelier de Haciendas Marqués de la Concordia en una conversación que sostuvimos con él en su recién visita a República Dominicana para interactuar con clientes y consumidores de sus marcas.

El representante de una de las familias de vinos más importantes en Salamanca, España, cuya marca engloba además una división de hotelería y gastronomía, refiere que tanto con un vino tinto reserva como crianza de Rioja, así como una cava brut rosado de la familia MM o una cava brut natural de la familia MM se puede maridar cualquier plato desde el principio de una comida hasta el final.

“Con cualquiera de estos vinos podemos acompañar pescados, mariscos, aves, carnes, pastas, e igual los dulces, ya que estos hacen un contraste espectacular en boca.

“A mí me encanta comer con cava toda una comida, porque me parece un vino más refrescante”, nos dijo.

“Nuestros cavas, tanto el brut natural como el brut rose elaborados con uvas blancas y rosadas nos brindan mucho volumen en boca. Es excelente para pescados, mariscos, aves, y dulces”.

“El cava de calidad, como el que nosotros producimos, hace el matrimonio perfecto con cualquier alimento, e igualmente nuestros tintos reservas o crianza”.

Concordia Brand Tours. Es el nombre de la actividad por la que estuvo en el país Jaime Boville García de Vinuesa, con la intención de compartir con clientes en el país.