Cuántas horas duerme? Si son menos de ocho al día, debe organizar su tiempo, porque esto podría afectar el funcionamiento de su organismo. Un estudio realizado en la Universidad de Columbia, Estados Unidos, contenido en la página web Mi dieta, da fe de que el mal sueño está aliado a la obesidad, por lo que se recomienda dormir un mínimo de ocho horas diarias para tener una vida saludable.
Asimismo, encontró que detrás de factores como la depresión, la falta de actividad física, y el consumo de alcohol, las personas que dormían menos eran más propensas a engordar.
Respecto al tema consultamos al endocrinólogo Félix Escaño, quien nos refirió varios estudios, los cuales confirman la teoría de que dormir menos conlleva a subir de peso.
Se refirió a los médicos Russell G. Foster y Kathatina Wulff, quienes afirman que las afecciones del sueño alteran el proceso físico con anormalidades metabólicas entre las que está la obesidad.
Citó también a los genetistas Molly Bray y Martin Young, quienes en pruebas realizadas en el Centro de Investigación de Nutrición en Houston, se encontraron con patrones anormales del sueño, que alteran los relojes circardianos que permiten a las células adaptarse a las variaciones en el medio externo, como son los cambios en los niveles de nutrientes (glucosa, triglicéridos y ácidos grasos) y la producción de hormonas (insulina). Mencionó igualmente a la doctora Matilde Valencia Flores, profesora de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México y psicóloga del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, quien asegura que la poca calidad en el sueño ocasiona alteración diurna, y que se traduce en síntomas como fatiga, irritabilidad y alteraciones del ánimo y de la calidad de vida.
Hormonas durante el sueño. Según estos estudios, las variaciones hormonales que sufre el cuerpo cuando duerme puede contribuir a subir de peso. El doctor Víctor Rodríguez Pérez del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, referido también por Escaño, sostiene que a causa de la alteración del sueño se puede subir de peso y se tiene tendencia a la obesidad.
Afirma Rodríguez que son dos hormonas las que se ven afectadas por los trastornos del sueño, la leptina y la grelina, las cuales están implicadas en la regulación del apetito. La grelina es producida principalmente por el estómago y aumenta las ganas de comer, mientras que la leptina es generada por las células grasas, lo que produce una sensación de consumir más calorías.
Otro estudio citado por Escaño es el de Emmanuel Magnot (Stanford), quien afirma que las personas que duermen menos de cinco horas, producen mayores niveles de grelina y descenso en los de leptina, lo que produce el aumento del apetito.