Hoy 
Hoy, en virtud de las nuevas técnicas de construcción y la posibilidad de mezclar distintos tipos de materiales, los primitivos modelos de muebles para jardines y balcones cerrados se han convertido en piezas de diseño tanto dentro como fuera de las casas.
La originalidad de muchas de estas piezas es tal, que incluso se sitúan en las entradas de hoteles y grandes centros públicos para llamar la atención y destacar o señalar determinados aspectos del local.
Es decir, actualmente el mueble de papel trenzado se emplea casi como una obra de arte, ya que por sí mismos son capaces de poner un toque de distinción en el ambiente e introducir el modernismo en cualquier espacio.
Es un mobiliario que esconde muchas posibilidades por su versatilidad y porque conjuga a la perfección materiales naturales tradicionales y materiales obtenidos gracias a procesos basados en las nuevas tecnologías.
Los modelos están hechos con bambú, ratán y caña pero, una vez terminados, gracias a las técnicas de su creador, adquieren el aspecto de un mueble de interior único.
El papel trenzado
La fabricación del mueble Lloy Loom o papel trenzado, es anterior a la Primera Guerra Mundial, lo que realmente es nuevo es su introducción en los hogares como elemento decorativo.
Con la interrupción del suministro del mimbre y del bambú, como consecuencia de la contienda bélica, Marshall Burns Lloyd, que se negó a parar la producción, se inclinó por el mueble ligero pero sólido, basado en la mezcla de nuevos materiales.
De esta búsqueda surgió el papel trenzado, que se parece bastante al mimbre pero es mucho más sólido y más liso. Esta última cualidad evita que la ropa se enganche. Se trata de un hilo de acero recubierto de papel kraft y tejido después, como una alfombra.
La técnica Lloyd Loom se adapta muy fácilmente a cualquier fantasía y puede plasmarse tanto en modelos clásicos como modernos, sobrios o singulares. El resultado siempre es maravilloso y original y, al mismo tiempo, extremadamente confortable.
Las piezas más originales y llamativas de este tipo de mobiliario están inspiradas en modelos del pasado actualizadas o modernizadas. Es el caso de los sillones, butacas, baúles, biombos…, de estilo colonial, sólo que ahora se hacen para ser situadas en salones o entradas de hoteles y tiendas de alto estándar.
El papel trenzado es una materia muy sólida, duradera y sobre todo muy estética.
Las colecciones más conocidas son los sillones imperiales; las sillas, butacas y sofás de estilo colonial, especialmente las inspiradas en la artesanía hindú. EFE-REPORTAJES.
