POR RAFAEL MARTINEZ
MOCA.- El representante de la FAO en la República Dominicana, doctor Antonio Morales, informó que unas 138,000 tareas de café han desaparecido de la zona montañosa de la provincia Espaillat, provocando pérdidas cuantiosas de la capa boscosa.

Morales dijo que en los últimos diez años en la zona montañosa de la provincia Espaillat existían unas 155,000 tareas sembradas de café, de las cuales en la actualidad sólo quedan unas 17,000, situación que ha motivado la emigración campesina y el bajo nivel de las actividades productivas de la zona.

Precisó que esta situación ha provocado además pérdidas en fuente de riquezas, empleos y sustento de la población. Indicó que la reducción de los niveles productivos ha acelerado la emigración desde la zona montañosa hasta el centro urbano de más de 30,000 personas, quienes en sentido general han pasado a engrosar los llamados cordones de miseria en los barrios de Moca.

Morales, habló en esos términos durante una conferencia titulada “Importancia de la regulación del uso de suelo”, invitado por el productor del programa local “Butaca 3”, que dirige el licenciado Mariano García, en la celebración de su sexto aniversario, a la actividad asistieron autoridades municipales y representativos de instituciones desarrollistas de esta ciudad. En su ponencia expresó que el municipio de Moca es una de las zonas geográficas del país con suelos de la mejor calidad para la producción agropecuaria.

Señaló que el 42.85% (76.71) del área total del municipio (179 Km.2) corresponde a suelos de clase uno, estando condicionado su potencial productivo por la disponibilidad de agua de manera permanente.

Apuntó que el municipio de Moca cuenta con una porción de las mejores tierras del mundo, sin embargo algunos sectores empresariales han usado los suelos altamente productivos y agrícolas para el desarrollo urbanístico y otras construcciones de origen pecuario e industrial, “sin tomar en cuenta que dichos suelos son las mejores armas para combatir exitosamente el flagelo del hambre”.

Manifestó que las causas del uso incorrecto de suelos productivos se deben esencialmente a la falta de educación cívica y concienciación ciudadana, lo que provoca la baja rentabilidad de los cultivos agrícolas. Dijo que las consecuencias se dejan ver en la reducción de la producción y productividad agrícola, contaminación del aire, suelo de las aguas subterráneas y de ríos, así como de los arroyos

Explicó asimismo, que se observa una disminución de las áreas de siembra, reducción de la calidad de vida de los habitantes de la zona y la disminución de la disponibilidad de alimentos para la población.

Morales recomendó poner fin al uso de suelo con potencial agrícola en la construcción de viviendas y otras obras de infraestructura, proteger el suelo por la función que desempeña en la conservación de la biodiversidad y la utilización de CO2 a través de las plantas. “Este gas es uno de los agentes responsables del calentamiento global y del cambio climático”.

Agregó que hay que proteger el suelo como fuente básica para la producción de alimentos y de materia prima para la agroindustria.

Manifestó que las autoridades municipales deben prohibir futuras construcciones de carácter pecuario, industrial y urbanístico en suelos clase uno, dando prioridad para este uso al empleo de terrenos ubicados en el polígono central de la ciudad.

Indicó que se debe realizar un estudio de impacto ambiental evaluando los niveles de contaminación causados por las empresas pecuarias y las industrias, a fin de tomar las acciones correctivas correspondientes.

A la actividad asistieron el síndico de Moca, doctor Miguel Guarocuya Cabral, el ex síndico, doctor Rubén Lulo Gitte, Manuel Camacho, presidente de la Asociación para el Desarrollo de la Provincia Espaillat (ADEPE), Dorka Balcácer, el diputado Víctor Luis Lasosé, Felipe Reyes Ledesma, ex síndico del municipio de Cayetano Germosén entre otros representativos de la comunidad.