Hoy 
Una nueva modalidad de robo que cometen delincuentes en zonas residenciales consiste en cortar los alambres de uno de los servicios de la vivienda, como el cable, el teléfono o la energía eléctrica, para luego presentarse a la casa y solicitar permiso de entrada a la doméstica, con la excusa de que van a solucionar la avería.
Llegan a la casa que tiene el problema al día siguiente, muy temprano, con el verdadero interés de penetrar para cargar con los objetos de valor y el dinero que puedan encontrar en la casa o apartamento.
Se aseguran de que se trate de una familia con dinero y de que el servicio esté prácticamente sólo, debido a que se percatan de sus dueños (el marido, la esposa o hijos grandes) se encuentren trabajando.
Los malhechores primero cortan los cables del servicio, que más tarde se ofrecen a reparar, seguros de que el personal que cuida la casa, cuando consulte a los propietarios, éstos les dirán que ciertamente tienen dificultad con el servicio de telecable, teléfono o el Internet. Proceden a confundir a la doméstica, hasta que sacan objetos de la casa sin ser vistos. La denuncia llegó la semana pasada a la Fiscalía del Distrito Nacional de parte de personas que declararon que los ladrones, incluso, suelen llegar vestidos con los uniformes que acostumbran a usar los técnicos de la compañía prestadora del servicio.
Acuden con una caja de herramientas parecida a la de los técnicos acreditados para la labor.
Personas que se quejan de la peculiaridad empleada por los maleantes para llevarse los bienes de los hogares, dicen que temen hacer la denuncia pública, puestos que estos conocen su domicilio, y podrían sufrir algún tipo de represalia contra los miembros de su familia.
Explican que la mayor cantidad de estos delitos sucedieron entre el 18 y el 25 de septiembre pasado. Indica que saben de varios delitos ocurridos en áreas residenciales.
Dicen que lo mejor es que las personas soliciten a su compañías el número del reporte que hacen en caso de averías, para evitar ser víctimas de robo.
