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El presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Lisandro Macarrulla, consideró ayer que el modelo de desarrollo económico de la República Dominicana debe modificarse, porque es insostenible. Entrevistado en el almuerzo semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, el dirigente empresarial lamentó que el país siga siendo excluyente a pesar del crecimiento económico que registra. Expresó que el CONEP reitera su llamado para que la sociedad en su conjunto se aboque a discutir esos cambios. El país tiene que abrir un espacio de reflexión para revisarse, no sólo para modificar ese modelo económico que hemos mantenido durante los últimos 50 años.
El presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Lisandro Macarrulla, consideró que el modelo de desarrollo de la República Dominicana debe modificarse, porque es insostenible.
Entrevistado en el almuerzo semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio, lamentó que el país siga siendo excluyente a pesar del crecimiento económico que registra.
Expresó que el CONEP reitera su llamado para que la sociedad en su conjunto se aboque a discutir esos cambios. El país tiene que abrir un espacio de reflexión para revisarse, no sólo para modificar ese modelo económico que hemos mantenido durante los últimos 50 años.
Macarrulla dijo que la nueva estructura económica que necesita el país debe tener como plataforma a los sectores productivos, porque son estos los que generan puestos de trabajo y les dan valor a la sociedad.
Aunque somos partícipes de la asistencia social de parte de los gobiernos, como mecanismo transitorio o compensación parcial, pero ningún país se desarrolla sobre esa base, sino a través de empleos dignos que tributen al fisco.
Al resaltar que la implementación de esa propuesta depende de una decisión política, explicó además que los empresarios también requieren condiciones para competir ya que han perdido un segmento del mercado doméstico a causa de las importaciones.
El mea culpa. En algunos de los asistentes al encuentro causó sorpresa que el CONEP promueva un cambio de modelo de desarrollo, cuando el empresariado se ha enriquecido con el vigente. Lograr que el CONEP asumiera esta nueva postura costó mucho trabajo internamente, porque la mayoría de sus miembros nos hicimos ricos dentro de este modelo de desarrollo, y hemos vivido muy bien y hemos logrado acumular capital.
Pero la visión empresarial va más lejos, por lo que creemos que el esquema de desarrollo que tenemos no es sostenible en el tiempo, por lo que tenemos que hacer las transformaciones que se requieren. Da pena que esta propuesta haya surgido del sector empresarial, que es el más conservador de la sociedad.
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La corrupción
A Macarrulla se le preguntó si percibía que la corrupción pública se traducía en menos inversión en los sectores sociales. La corrupción impide que la gente reciba servicios de calidad, pero además, en la dinámica de la corrupción participa el sector público y el privado y lo peor es que la sociedad no rechaza esos comportamientos inadecuados, respondió el empresario.
Lavado de dinero
Al abundar sobre aspectos dolosos expresó que el lavado de dinero está creando una grave distorsión en las áreas productivas, cuando hay personas o grupos empresariales involucradas en ese tipo de actividad.
