El presidente de la Confederación Nacional de la Unidad Sindical (CNUS), Rafael –Pepe—Abreu, y el presidente del Consejo Nacional de Iglesias, Braulio Portes, sugirieron al Congreso y los partidos políticos que aprovechen el momento para establecer un sistema de elección presidencial semejante al de Estados Unidos, que es lo que más convendría a la economía dominicana.

Según Abreu, la reelección o no de un gobernante puede constituir uno de los mecanismos de los que dispone el electorado para premiar o castigar la gestión de los políticos en beneficio o perjuicio de la economía.

Mientras que el presidente del Consejo Nacional de Iglesias, Braulio Portes, dijo que era de consenso que el país instaure un sistema de elección presidencial semejante al de Estados Unidos, aunque para ello sea necesario modificar la Constitución.

Según el líder evangélico, la reelección presidencial es un fenómeno electoral existente en algunos países, que implica que un ciudadano que ha sido presidente pueda volver a serlo de forma consecutiva o por período interpuesto.

“Ojalá que se instaure ese sistema de elección presidencial, porque sería menos complicado y más democrática la actividad política en el país”, dijo Portes, agregando que además, se permitiría al gobierno de turno adelantar o terminar las ejecuciones para el desarrollo a largo plazo de la economía dominican.

Entiende que tarde o temprano tendrá que hacerse una modificación constitucional que garantice la estabilidad política y elimine los debates reeleccionistas cada cuatro años, según dijo.

Tanto Abreu como Portes coincidieron en señalar que es el presidente Medina, como principal interesado, quien debe fijar una posición pública sobre su eventual postulación como candidato del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) para las elecciones generales de mayo del 2016.

Pepe Abreu consideró que hay circunstancias evidentes que favorecen la reelección de Medina, como su gestión presidencial discreta y eficaz que le ha permitido mantener su popularidad con altos índices de apoyo y la inexistencia en la oposición de individuos que consigan persuadir al electorado de su superioridad o aptitud respecto al actual gobernante.

“Se trata de un asunto de vital importancia para la nación y es el presidente Medina, el interesado, quien debe decir cuanto antes al país si desea participar o no como candidato en esas elecciones”, señaló Abreu. Agregó que el gobernante tiene todo el derecho de llevar esa propuesta a los organismos de dirección del PLD.