No sólo las personas con algún problema de salud se ven afectadas, aunque de hecho son el grupo de mayor riesgo, las personas aparentemente sanas suelen ganarse también problemas de salud por los excesos. Los órganos más afectados por no tener moderación en estas fechas son el estómago, el intestino delgado, el colon, el hígado y el cerebro. En pocas horas o días, una ingesta excesiva de alcohol podría producir el desarrollo de una esteatosis hepática o hígado graso. Las crisis hipertensivas, los comas en diabéticos, las crisis de gota, las anginas de pecho o los infartos suelen incrementarse también en estas fechas. Entre los excesos comúnmente registrados encontramos:

– El exceso de alcohol: el champagne, el vino, la cerveza etc. no faltan en las fiestas. Sin moderación tenemos asegurada la típica resaca que suele ser más intensa en las personas fumadoras. Esta se caracteriza por síntomas como dolor de cabeza, sequedad de boca, mareos, sed y malestar general acompañado, en algunos casos, de náuseas y acidez de estómago. Dos o tres copas de licor son suficiente para dar un brindis y compartir la velada, pero si usted bebió alcohol y se olvidó de la moderación no agrave su estado con las grandes comidas, prefiera alimentos suaves bajos en grasa, bien cocidos, pequeñas cantidades, beba agua y consuma fruta fresca.

– El exceso de comida: muchos dejan de comer en el día para darse el gran banquete de Nochebuena, aunque no lo crean así se come mucho más, y por si fuera poco se termina con un empacho que requiere atención médica. Es mejor tomar un desayuno y almuerzo ligero (es decir, no obviar las comidas sino reducir las cantidades) y si lo requiere, tenga una pequeña merienda (por ejemplo 1 fruta), de esta manera no tendrá tanta hambre y logrará la moderación.

– El exceso de peso: por un lado en diciembre se incrementa el número de reuniones; por otro lado nos llega a la mesa el delicioso panetón, los chocolates y los dulces navideños que siempre están a la orden del día y qué difícil es decir que no. Sin darnos cuenta, en promedio ganamos 4 a 5 kilos este mes. ¿Cómo evitarlo? Siga los siguientes pasos:

1. Recuerde las pautas de la dieta saludable (comer de todo variado en pequeñas porciones evitando comida rápida).

El dato

1 Organiza el menú de la semana o el mes, orientando a que sea bajo en calorías (lácteos descremados, moderar la cantidad de sal y grasas, reducir la cantidad de carbohidratos, aumentar las ensaladas y la cantidad de agua).

2. Procura no tener un plato de fondo en la cena, prefiera un lonche balanceado por ejemplo, un emparedado en pan pitta con queso fresco bajo en grasa, una ensalada y una fruta.

3. Evita estar picando entre comidas, esto suma calorías que en este mes podrían estar sobrando.

En su lugar beba líquidos naturales (agua, infusiones sin azúcar, agua de piña, emoliente etc.).

4. Aumenta tu actividad física, procura dedicar al menos 30 minutos diarios al ejercicio.

Si no puedes, procura caminar, subir escaleras, montar bicicleta etc.

5. Acostúmbrate a calcular el tamaño promedio de su ración (es decir mida la cantidad que come normalmente), ese mismo tamaño debe mantener en las cenas o almuerzos navideños.

Como verás, en Navidad no necesitas prohibiciones, la moderación debe ser tu mejor protección, para evitar los excesos.

¡Así podrás realmente disfrutar de las bondades de la Navidad, sin remordimientos y sobretodo sin tener que estropear las fiestas o preocupar a los tuyos por tener que salir corriendo para la emergencia a atender algún desórden de salud!