Por FIOR GIL
Los nuevos accionistas de la Compañía Eléctrica San Pedro de Macorís (Cogentrix) se comprometieron con la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) a introducir modificaciones al contrato vigente para reducir el cargo por capacidad instalada que actualmente obliga al gobierno a pagar alrededor de cuatro millones de dólares, aún estén las plantas apagadas.

La CDEEE logró también reducir el pago por compensación del costo de combustible que se aplica para las tres unidades de la empresa generadora aunque sólo una entre en operación.

La Cogentrix, que había pasado por varios propietarios, y que estaba en manos de la empresa Golman Schads y de la CDC (Globelec) fue vendida recientemente a un consorcio de inversionistas nacionales e internacionales, encabezado la empresa Basic Energy Limited, Rolando González Bunster, quien preside, además, el consejo de la Empresa Generadora de Electricidad Haina (EGE-Haina) y la compañía eléctrica que suple de energía a los complejos turísticos de Bávaro y Punta Cana.

La Cogentrix, un proyecto que se inicio en el primer gobierno del presidente Leonel Fernández y que en el año 2000 ya había entrado en operación comercial, es una generadora de ciclo combinado de 300 megavatios distribuidos en tres unidades de 100 megavatios  cada una, instaladas en San Pedro de Macorís. Opera bajo un contrato con la CDEEE cuya ejecución, debido al alto costo del combustible que utiliza (fuel-oil número 2 o gasoil) llegó a convertirse en una especie de dolor de cabeza para el gobierno, según declaraciones del vicepresidente ejecutivo del consorcio estatal, Radhamés Segura.

El funcionario explicó a HOY que debido al alto costo del gasoil, las plantas de la Cogentrix no han operado de manera normal, lo que ha implicado que además de tener que pagar 48 millones de dólares anuales por cargo de capacidad instalada “no hemos podido obtener esa energía disponible y por vía de consecuencia, ha contribuido al déficit en el sistema energético.

BENEFICIOS CON NUEVOS DUEÑOS

Al cambiar de dueños esta central, que originalmente estaba financiada por un préstamo avalado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y otras instituciones financieras, se encontraba impedida de renegociar el contrato con la CDEEE, que había planteado renegociar dicho contrato y reducir el cargo por capacidad instalada para pagar US$I.2 millones mensuales en lugar de cuatro millones de dólares y lo mismo con la compensación del combustible para que la planta que fuera encendida y no sobre la base de las  tres unidades que tiene la generadora.

“Y la verdad es que desde el punto de vista accionario los prestamistas de esta central el gobierno ha tenido también muchos dolores de cabeza. Cuando se inician los trabajos de la renegociación de los contratos en noviembre del año pasado, nosotros ya habíamos estructurado una comisión tratando de renegociar ese contrato y estábamos pidiendo una reducción de un 30% en el cargo por capacidad que hemos dicho de cuatro millones de dólares para bajar a 1.2 millones al mes de reducción en el pago por capacidad y también en los costos  de operación y mantenimiento”, explicó Segura.

Dijo que si se daban esas condiciones el contrato quedaría renegociado, si los accionistas accedían, “otra petición que habíamos hechos era que la compensación de combustible que se estaba aplicando para la central se hiciera por unidad sin embargo el tipo de cálculo que estaba dentro del programa era que se considerara la compensación del combustible para las tres  unidades aunque sólo estuviera en servios una unidad, lo que está causando una perdida significativa para la CDEEE en cuanto a la facturación mensual”.

Sin embargo, el mismo reclamo fue planteado y ha tenido más receptividad por parte de los nuevos propietarios de la Cogentrix.

“Este cambio que se ha producido en los accionistas, que son los propietarios, un consorcio encabezado por la empresa Basic Energy y Limited, que ya tiene raíces en la República, porque unos de los principales accionistas o el presidente de esta empresa es Rolando González Bunter”, agregó Segura.

Segura dijo que una de las ventajas que presenta el cambio para el gobierno  es que el banco que realiza el financiamiento de la compra es el City Bank, que había puesto como condición que la operación de las plantas fuesen despachada normalmente y para eso es necesario cambiar el combustible y entonces se va reconvertir para el uso de fuel-oil a gas natural.

Expresó que el cambio representa una disminución muy grande en el costo de generación, por ejemplo, “en este momento un kilovatio/hora para un factor de carga de 65% en la planta producido con gasoil puede andar entre los 13 ó 14 centavos de dólar, pero si es producido con gas natural, al precio de hoy en día, siempre que la planta sea despachada a 65 % de la carga, podría costar entre 8 y 8.5 centavos de dólar el kilovatio/hora”.

 Al producir la energía a un precio tan bajo es evidente que la planta es despachada completa por el orden de mérito y por vía de consecuencia a no estar las éstas apagadas, ya que la CDEEE no tendría que pagar cuatro millones de dólares para cubrir el cargo por capacidad.