Hoy 
POR LOYDA PEÑA
La inconformidad de los diputados con la reformulación del proyecto de Presupuesto provocó ayer serias dificultades para la celebración de la sesión donde se conocería la pieza.
En procura de cohesionar a los diputados del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en torno al proyecto, fue necesario una reunión previa de casi cuatro horas, de la que no todos salieron satisfechos.
Igual ocurrió con los bloques de los partidos Revolucionario Dominicano (PRD) y Reformista Social Cristiano (PRSC), entre quienes había criterios encontrados acerca de si aprobar o no el Presupuesto de la Nación sólo con las modificaciones que, según ellos, sólo beneficiaba a los senadores.
La queja de todos es que la Comisión Coordinadora que encabeza el presidente de la Cámara, Julio César Valentín, y en la que el hemiciclo delegó las negociaciones con el Gobierno luego de romperse la comisión bicameral que estudiaba el proyecto, “se conformó con los RD$300 millones que le reasignaron a la Cámara de Diputados”.
Esta aseveración fue rechazada por el presidente de la Cámara Baja, quien aseguró que incluso él no estaba conforme con los RD$2,536 millones que se le asignaron a ese hemiciclo.
“Pero naturalmente, hay una serie de restricciones, montos topes que imponen los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otra parte que es la posición del gobierno, y el Comité Político del PLD ha fijado apoyo a esas iniciativas del Poder Ejecutivo y nosotros no podemos entrar en contradicciones en cuestiones de fondo como esa”, subrayó Valentín.
En ese sentido, descartó que el adendum enviado por el Poder Ejecutivo pueda ser modificado en la Cámara de Diputados no obstante la inconformidad de muchos legisladores, incluso peledeístas, porque para ello se necesita de las dos terceras partes de los votos, “y el gobierno también cuenta con los legisladores de su partido a quienes el Comité Político le bajó línea de apoyo a esas iniciativas”. Agregó que además, el adendum se hizo en el interés de ceder en algunos de los requerimientos de legisladores de las distintas bancadas.
Toda esa situación obligó al presidente de la Cámara de Diputados a tener que posponer en tres oportunidades la sesión, “para dar chance a que los distintos bloques se pongan de acuerdo”.
La convocatoria, que inicialmente se había hecho para las 10:00 de la mañana, debió ser pospuesta por falta de quórum para las 11:45, y luego para las 3:30 de la tarde.
