El arzobispo metropolitano, monseñor Francisco Ozoria Acosta, encabezó anoche la misa de desagravio por la profanación de la parroquia La Epifanía del Señor, en Villa Carmen, Santo Domingo Este, donde el 23 de octubre pasado varios individuos violentaron las cerraduras y robaron copas con hostias consagradas.
A la misa asistieron cientos de personas, que oyeron los mensajes de paz, amor y perdón para vencer el mal a fuerza de hacer el bien, que dieron el arzobispo Ozoria, monseñor Benito Angeles y el párroco Warner Familia.
Oraron por la conversión al bien de quienes profanaron el templo, que estuvo cerrado por tres meses.
“Aquí sucedió una profanación; en primer lugar al Santísimo Sacramento de la Eucaristía, es decir, el Sagrario fue violentado teniendo dos copones llenos de hostias consagradas. También se llevaron las bocinas y otras, pero eso no es de tanto valor, el gran valor son las hostias, que una vez consagradas son el cuerpo mismo de Cristo”, explicó monseñor Benito Angeles.
Afirmó que pese a que ya han pasado tres meses del robo, las autoridades aún no dan ninguna respuesta.
“Esa es una acción gravísima dentro de la Iglesia Católica. Estamos esperando respuesta. Insistimos en que no nos dejen esperando, que procuren buscar donde están las causas de esta depravación. En términos religiosos, eso se llama sacrilegio. Eso fue un abuso a lo sagrado”, dijo.
Agregó que no se descarta y “simplemente podríamos suponer que algunos grupos satánicos podrían estar abusando de las hostias consagradas. Esperamos que no sea así”.