Afirma Cuaresma debe servir para reflexionar y cambiar

Al oficiar una misa en el inicio de la Cuaresma, el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria Acosta, llamó a la sociedad dominicana a la reconciliación, la conversión, la fraternidad y la unidad para enfrentar los males que la afectan, impulsando un cambio hacia una actitud positiva, de ayudar y hacer el bien.

Al oficiar la misa en la Catedral Primada de América en ocasión del Miércoles de Ceniza y de inicio de la Cuaresma, monseñor Ozoria basó sus palabras en la importancia de reflexionar la conversión, la reconciliación, limosna, la oración.

La misa fue concelebrada con el párroco Nelson Clark y los sacerdotes Evaristo Heres y Teófilo de la Cruz. La ceniza se impuso a los feligreses en la cabeza y manteniendo la distancia establecida por los protocolos de salud para evitar la propagación del covid-19.

Pese a las restricciones por la pandemia a la celebración asistió una cantidad significativa de feligreses que mantuvieron distancia y usaron sus mascarillas.

“Hoy en día es necesario la reconciliación y el llamado al conversión es también un llamado a la reconciliación: tenemos que cambiar y reconciliarnos”.

“Del polvo venidos y en polvos nos convertiremos”, reflexionó monseñor Ozoria previo a imponer la ceniza a los feligreses presentes y a llamar a un mayor acercamiento entre las personas y a dejar atrás el orgullo.

“Hay que reconciliarse con Dios y con los demás, con nuestros hermanos”; expresó monseñor Ozoria.

Afirmó que en estos momentos que vive el país y el mundo hay que promover la fraternidad y restaurar la unidad entre las personas.

“El problema de la sociedad de hoy es que no nos reconocemos como hermanos. La fraternidad es algo que no se practica. Debemos sentirnos responsables los unos de los otros”, dijo.

Es muy importante, dijo, reconciliarse con Dios y las personas del entorno, practicando la limosna, que significa caridad y compartir.

Otras palabras que afirmó llaman a la reflexión son la oración deseando el bien de la humanidad y la practica del ayuno, que es privación, sacrificio y una ofrenda en nombre de Dios y lo que significa.

Ayer inició la cuaresma con el Miércoles de Ceniza y la imposición de las cenizas, un tiempo relevante para los feligreses cristianos, ya que es la preparación para la vivir el Misterio Pascual, la Pasión, Muerte y Resurrección del Señor Jesús. Concluye el domingo de resurrección el 4 de abril.

La ceniza, del latín “cinis”, tiene para los cristianos católicos un significado simbólico de muerte, caducidad y adquiere el sentido humanidad y penitencia, con el gesto de la imposición de ceniza en la frente, la cual es resultado de cremar las palmas del Domingo de Ramos del año anterior.