El arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria, encabezó hoy una delegación de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED) que visitó la presidenta de la Cámara de Diputados, Lucía Medina, para mostrar la preocupación de la iglesia sobre el tema del aborto en el Código Penal.
«Es importante que se apruebe el nuevo Código Penal, ya que el existente es muy atrasado porque tiene más de 200 años», resaltaron durante el encuentro en el que participó también el vicepresidente de la CED, José Dolores Grullón Estrella; el obispo de Baní, Víctor Masalles, y Benito Ángeles, vicario episcopal de Santo Domino Este.
Se recuerda que la Cámara de Diputados tiene la última palabra en este tema y es que de aprobar el Código Penal como lo envió el Senado, se penalizaría el aborto en todas sus causales.
El debate público en torno a la modificación del Código Penal se ha concentrado, especialmente, a las observaciones que realizó el presidente de la República, quien no está de acuerdo con la penalización absoluta y sin excepción de la interrupción del aborto.
En el caso de la iglesia y otros sectores respaldan la penalización en todas sus partes del aborto, mientras que grupos feministas y otras organizaciones demandan que el aborto sea despenalizado en tres causales, es decir, cuando corre riesgo la vida de la mujer gestante; cuando existen malformaciones congénitas incompatibles con la vida, y cuando el embarazo es resultado de una violación o incesto.