SAN JUAN DE LA MAGUANA.- El secretario Técnico de la Presidencia, Juan Temístocles Montás, planteó que el mejor aporte del Gobierno al desarrollo de la agropecuaria es el control de la tasa de inflación, como se ha hecho, y mantener la estabilidad de los índices fundamentales de la economía.

El funcionario exhortó a los productores a trabajar por garantizarle al país la seguridad alimentaria, y dijo que los datos recientes precisan que 2.5 millones de dominicanos están sub-alimentados y hay que luchar por elevarles la calidad de su ingesta. Montas hizo una proyección de la tasa de crecimiento demográfico del país en los próximos 20 años, es decir, al 2025, y aseguró que en esa fecha tendremos 3 millones más de dominicanos a quienes hay que alimentar, de un total de población que se espera de 12.5 millones de habitantes.

Sostuvo que con ese cuadro, el consumo potencial del turismo y la demanda de los mercados internacionales, los productores agropecuarios tienen la oportunidad de aumentar sus niveles de productividad porque se trata de un gran mercado.

El secretario Técnico de la Presidencia pronunció la charla central en el IX Encuentro Nacional de Dirigentes del Sector Agropecuario, patrocinado por la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD), que tuvo como tema Hacia la Competitividad del sector Agroalimentario Dominicano, al que asistieron líderes de la agropecuaria de todo el país. Precisó que si los gobiernos que se sucedan al 2025 mantienen políticas económicas estables y aseguran una dinámica económica que permita el crecimiento de manera sostenible, si ese crecimiento se mantiene en términos anuales de alrededor de un 7%, tendremos en el 2025 un ingreso percapita de cerca de 9 mil dólares, ahora son 3 mil dólares el ingreso per cápita. Si es así, obviamente que se aumentaría la capacidad de consumo de los dominicanos, pero todo eso depende de la estabilidad de la economía y de que haya crecimiento.

Observó que si el crecimiento sigue igual que el del año pasado, en los próximos 20 años, básicamente el ingreso per cápita será el mismo, alrededor de US$3,000.00 anuales . Por tanto hay que hacer un esfuerzo por lograr que los gobiernos que se vayan sucediendo de aquí al 2025 hagan un gran esfuerzo por asegurar que esa dinámica económica que obtenemos en el país se mantenga y se sostenga, porque así ustedes los productores tendrán la oportunidad de ampliar el mercado de consumidores, y así podrán producir más.

Estimó que si se mantienen el consumo per cápita de pollo, arroz y habichuelas del año pasado de cara a los próximos 20 años, el consumo de esos rubros crecerá 36%. Pero además, nosotros tenemos en estos momentos alrededor de 2.5 millones de personas sub-alimentadas, que equivale al 29 por ciento de la población. Si el país crece de manera vigorosa se puede asumir que esas personas que hoy están sub-alimentadas se van a alimentar bien, van a tener acceso a los alimentos y por tanto el consume de alimentos conforme aumente el desarrollo económico y disminuya las personas sub-alimentadas también va a aumentar. De manera que en definitiva el sector agropecuario tiene una gran oportunidad, siempre y cuando garanticemos previsibilidad en las políticas económicas que se van a seguir, con crecimiento sostenido de la economía y la generación de empleos en la República Dominicana, agregó.

Recalcó que el Gobierno está comprometido con el ejercicio de una política económica que preserva la estabilidad y el crecimiento económico mediante un manejo cuidado de los equilibrios fundamentales de la economía, tanto en el orden fiscal como monetario.

Este clima fortalecerá las capacidades del sector agropecuario, la inversión en la competitividad en sector. En la medida en que se mantenga la estabilidad de precios y se reduzca aún más la inflación, seguirán bajando las tasas de interés, un elemento medular para conseguir ese objetivo es resolver el stop de certificados del Banco Central que es un serio problema que hay que enfrentar para garantizar que no se ponga en peligro la estabilidad que se está construyendo.

POLITICA

Dijo que el Gobierno apoya los ejes de la política llevada por las autoridades agropecuarias, que se sintetizan en apoyo a la producción para consumo interno, protección del ingreso familiar y rural, apoyo a las agroexportaciones, mitigación de la pobreza rural, reforma y modernización del sector agropecuario y fortalecimiento institucional.

Apuntó que el Gobierno otorga la máxima prioridad al proceso de transformación del marco legal e institucional del sector agropecuario, a los fines de lograr una mayor eficacia de recursos que el Gobierno le asigna al sector a los fines de que los servicios que ofrece redunden en beneficio de la colectividad.

La reforma financiera que se desarrolla actualmente en el Estado incluye la modernización de la gestión de la deuda publica. Eso traerá consigo el desarrollo más rápido de un mercado de capitales doméstico, lo que abrirá la oportunidad para comercializar variados instrumentos financieros, sobre todo títulos de renta fija. Una vez desarrollado ese Mercado el sector agropecuario podrá tener acceso al mismo, dijo.

PONENCIA

El funcionario pronunció una charla en el marco de la celebración del IX Encuentro Nacional de Dirigentes del Sector Agropecuario, en la que explicó la política económica del Gobierno y culpá la anterior gestión por una inflación de alrededor del 50%, una devaluación del peso del mismo porcentaje , un gasto gubernamental de más de 45 mil millones y por la responsabilidad de la pérdida del crédito internacional.

La mala política económica del gobierno anterior produjo que el Banco Central debiera pagar tasas de interés cercanas al 60%, lo que provocó que el sector agropecuario y ningún otro pudieran tener acceso al crédito.

Expuso que para sacar al país del derrumbe de su economía e ir estabilizando los índices económicos y crecer, el Gobierno del presidente Leonel Fernández debió dejar de gastar alrededor de 32 mil millones de pesos en el 2005, para llevar el déficit del sector publico consolidado de 7.6 a 3.3%. Un ajuste 4.4 de del Producto Interno Bruto que el año pasado era de cerca de 8,000 mil millones de pesos.

Diijo que se debió aplicar una política monetaria restrictiva mediante la cual el Banco Central redujo su déficit cuasi fiscal de 4% del PIB que había sido en el 2004 a 2.9% en el 2005.

También se reestructuró la deuda pública externa de 3,680 millones de dólares en el 2000 a 6,4000 millones en el 2004 en que casi se duplicó. De igual forma la deuda pública interna que en el 2000 era 7% del PIB, y al 2003 era del 56% del PIB, de los cuales 36% era deuda interna y el resto externa.

Asimismo, indicó que de cerca de un 20% de deuda interna, el 14% era deuda del Banco Central por la crisis bancaria del 2003. El país tenía atrasos con el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial. Fue reestructurada la deuda con los organismos de crédito internacional, y se logró dos años de gracia.

Señaló Montás que a partir del año próximo se deberá empezar a pagar los compromisos contraídos con la reestructuración financiera. El índice de solvencia financiera es el 12% frente a una solvencia de la normativa nacional de un 10%.

Se recupera la confianza

Según Montás, toda esa política ha permitido la recuperación de la confianza, puesto que la inflación del 40% bajó a 7.4% y pese al incremento de los precios petroleros, se proyecta que este año estará en un 5 a 7%. Expresó que la tasa de interés está en 11%, la de cambio entre 32 y 33 y no hay volatilidad. Al país se le ha abierto la oportunidad, si lo considera conveniente, de acceder a los mercados financieros internacionales a tasas de interés relativamente baja, por la recuperación de la confianza en el país.

Indicó que la decisión es mantener una tasa de inflación por debajo de los 2 dígitos, y hay seguridad de que el Gobierno se no se va a exceder en el gasto.

Manifestó que el déficit proyectado para fines de año no se va ser ocasionado por el Gobierno, sino por el pago de certificados por el Banco Central, el 2.7 del PIB para el 2006. Dijo que el PIB fue encontrado en 7.7 y para dos años se va para 2.7 del PIB. La exigencia de endeudamiento a los países europeos es que no pasen del 3% del PIB del déficit. Pronto habrá presupuesto que genere superávit fiscal para enfrentar la deuda pública.

FONDO DEL MILENIO

Explicó Montás que se trata de recursos destinados por Estados Unidos con el propósito de apoyar a los países que entran en el acuerdo de libre comercio, para que mejoren los indicadores que permitan que estos países puedan intentar insertarse en forma positiva en el TLC.

Informó que el gobierno de Estados Unidos exige a cambio para poder accede a esos recursos, que se cumplan una serie de requisitos que ellos miden en función de indicadores, como el de gobernabilidad, de inversión en le gente y vinculados al manejo de la economía.

Los indicadores que tenía en el 2004 la República Dominicana cuando se inicio el programa, no permitían poder accede a esos recursos, señaló.

Dijo que países como Honduras han podido acceder. República Dominicana por tener esos indicadores deteriorados a lo largo de los últimos años, no ha podido beneficiarse. Nosotros estamos trabajando de manera conjunta hace más de un año con las autoridades acreditadas del Gobierno de los Estados Unidos en República Dominicana, y es muy posible, hay mucha posibilidad de que dado el mejoramiento de una cantidad de indicadores como los fiscales, de política comercial, alguno de gobernabilidad y social, el país pueda acceder a partir del año próximo,dijo.

Expresó que eso es un indicativo de que hay que tratar de que los gobiernos hagan las cosas bien, y del impacto que provoca en las economías, el retraso en sus políticas. De manera que nos hemos pasado más de un año trabajando con los funcionarios norteamericanos, mostrándoles el esfuerzo que hemos estado haciendo para mejorar la política fiscal y monetaria, en el área de la salud, los índices de gobernabilidad, a los fines de lograr que la República Dominicana pueda accede a los beneficios de ese programa.