GINEBRA, Suiza. El gobierno advirtió ayer en esta ciudad a la comunidad internacional que la escasez de recursos, agravada por la caída de los ingresos fiscales a causa de la crisis económica mundial, se está convirtiendo en un serio obstáculo para que el país reduzca sus niveles de pobreza y garantice la igualdad de oportunidades entre sus ciudadanos.

La advertencia fue hecha por el secretario de Economía, Planificación y Desarrollo, Juan Temístocles Montás, quien hizo un llamado “vehemente” a los países desarrollados para que tomen en cuenta esta situación y establezcan mecanismos novedosos de financiamiento que ayuden a evitar el deterioro de las economías de las naciones en vía de desarrollo.

 Montás habló en esos términos en una actividad sobre el examen de la política de inversión auspiciado en esta ciudad  por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad) en el que participan representantes de varios países.

En su exposición, Montás enumeró los retos que en el corto, mediano y largo plazo enfrenta la República Dominciana en materia de desarrollo económico, social y de proyectos de infraestructura, pero advirtió que la demanda de recursos necesarios para acometer estas tareas excede por mucho la capacidad del gobierno para satisfacerlas.

Fue entonces cuando Montás dijo que esta incapacidad del régimen “se ha agravado por efecto de la crisis económica y financiera actual que ha afectado negativamente los ingresos y el financiamiento del gobierno”.