COTUÍ. SÁNCHEZ RAMÍREZ.  Moradores de la comunidad de Las Flores, en este municipio, expresaron su temor de que en el lugar se produzca un brote de cólera u otras enfermedades,  si las autoridades no acuden en su auxilio,  debido a que cuando el río Capacho se desborda, convierte la zona en una cloaca.

Dijeron que las aguas negras y la materia fecal desprendida que se generan en los diferentes   sectores de la parte alta de la ciudad van a parar al río,   contaminando el agua que entra a sus casas, cuando hay inundaciones.

El pasado martes 150 viviendas fueron inundadas cuando el Capacho se desbordó, afectando a más de 200 familias pobres, que  esta semana dos veces han tenido que ser alojadas en refugios improvisados, sin recibir alimentos y durmiendo en el suelo, según explicaron.

Los moradores de Las Flores expresaron que están cansados de los repentinos desalojos a que son sometidos, luego de haber perdido sus ajuares, y que no entienden la falta de competencia de las autoridades para buscar solución al problema.

Indicaron que cuando suena una sirena de la Policía salen despavoridos de sus casas, porque es  señal de que deben dejar sus hogares para ser llevados a escuelas, que sirven de refugio.

Según Dominga Arias, lo peor de la situación es que cuando son desalojados son ubicados en lugares sin condiciones para pasar ni  si quiera una noche.

“El martes a las 10:00 de la noche vino un coronel a sacar a todo el mundo a la fuerza; nos fuimos y nos alojaron en una escuela. Nos dejaron allá, sin pasarnos ni agua hasta las 9:00 de la mañana. Cuando viendo los niños muertos del hambre, nos rebelamos y cogimos cada quien para su casa”, expresó Arias.

Iguales quejas expresaron Antonio   Toribio Almánzar y José Ramón Vásquez, quienes  pidieron la intervención del presidente de la República, ya que, según advirtieron,  la contaminación, las inundaciones y las condiciones infrahumanas en que viven atentan contra sus vidas.

Dijeron que  Las Flores está ubicada en una zona de peligro, que constantemente es  inundada por el río Capacho y frecuentemente sus residentes son desolados. Demandaron de las autoridades  acudir en su auxilio, porque, según dicen, son usados por políticos.