Puerto Príncipe. El huracán Matthew azotaba con fuerza devastadora este martes a Haití, donde dejaba dos muertos y un desaparecido, grandes inundaciones, en tanto obligaba a miles de personas a huir de sus fauces.
El «extremadamente peligroso» ciclón impactó en la ciudad de Anglais en torno a las 7 de la mañana (11H00 GMT) con vientos máximos sostenidos de 230 km/h, dijo el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, con sede en Miami.
El huracán más amenazante en casi una década, Matthew azotaba con furia la costa sur de Haití, mientras grandes marejadas causaban inundaciones, alimentadas por fuertes precipitaciones.
Antes de tocar tierra en Haití, el país más pobre de las Américas, que comparte la isla La Española con República Dominicana, Matthew ya había causado inundaciones en 11 comunidades, según Edgar Celestin, portavoz de la agencia de Protección Civil, a la AFP.
Los pronósticos indican que Matthew provocará entre 38 y 63 cm de lluvias en el sur de Haití, e incluso más de 100 cm en zonas puntuales.
Muerte y destrucción
Una mujer enferma murió en la noche del lunes en el poblado costero de Port-Salut al verse imposibilitada de dejar su vivienda para recibir ayuda médica.
En la noche del viernes, un hombre falleció al naufragar la embarcación en la que iba con otros dos pescadores, en la costa sur, quienes lograron llegar a la costa.
Otro hombre desapareció en un bote precario que se rompió el domingo en Aquin, también en el sur de Haití, en la que iban otras tres personas que sobrevivieron.
En Anglais, las aguas habían inundado la ruta nacional, y Matthew, que avanzaba rumbo norte a unos 14 km/h, causaba estragos en las precarias edificaciones del sudeste del país.
En Les Cayes, la tercera ciudad del país, el agua del mar inundaba las calles. «Ya hemos tenido un deslave entre Les Cayes y Tiburon», en el Departamento Sur, dijo Marie-Alta Jean-Baptiste, directora de Protección Civil, a la AFP.
Más de 6.400 personas fueron evacuadas a refugios temporales, aunque muchos otros se negaron a dejar sus pertenencias en las zonas más vulnerables.
Entre esas áreas figuran barrios extremadamente pobres y densamente poblados como Cite Soleil -donde 100.000 de sus 500.000 residentes enfrentan serios riesgos de inundación- y el capitalino Cite L’Eternel, sobre la costa.
«A nadie le gusta abandonar su hogar, pero el mar va a subir y eso es muy peligroso», señaló Pedro González, un chef retirado que abandonó el islote donde reside frente a la ciudad de Santiago.
El gobierno suspendió las clases el lunes con el fin de que los centros escolares sirvan de refugio. Se montaron 1.300 refugios provisionales en todo el territorio, aunque solo permiten acoger a 340.000 personas. Haití cuenta con más de 10 millones de habitantes.
Miles de personas aún viven en tiendas de campaña tras el devastador terremoto que devastó a Haití en 2010. Además, la erosión es muy peligrosa debido a las montañas y la desforestación.