Pese a que desde el primer día que se habilitó su área de covid-19 esta fue ocupada totalmente por pacientes ingresados, el Hospital Dr. Francisco Moscoso Puello continúa asistiendo a las personas que requieren pruebas rápidas y PCR, además de que evalúa habilitar más camas para nuevos internamientos.

Este centro de salud situado en el norte del Distrito Nacional dispone de 16 camas para pacientes de covid-19 y 12 en la unidad de cuidados intensivos (UCI), las cuales están ubicadas en un área que fue preparada específicamente para estos casos y que desde que empezó a funcionar, el viernes 17 de este mes, ha estado ocupada en su totalidad.

Empero, las autoridades sanitarias están evaluando la edificación de cuatro pisos, que no conecta con el resto del hospital, con el objetivo de expandir el área covid-19 con la adición de 16 camas más.

En conjunto con los nuevos espacios fueron contratados 26 médicos y más de 40 enfermeras, quienes están bajo entrenamiento para tratar a los infectados del coronavirus, así como técnicos y personal de seguridad para esta ala del hospital Moscoso Puello.

El cúmulo de pacientes en la entrada del área, que tuvo lugar hace unos días, fue solucionado cuando algunos de los que ya estaban ingresados fueron dados de alta, mientras que otros fueron traslados a otros centros de salud.

Los parientes de enfermos ya ingresados en este centro de salud cuentan que no tuvieron dificultades para que sus familiares contagiados fueran atendidos.

No obstante, durante la entrega de información, ayer a las 11:00 de la mañana, a algunos les comunicaron que sus allegados debían ser trasladados a cuidados intensivos.

Pruebas sin cesar. El área de triage respiratorio del hospital Moscoso Puello practica unas 150 pruebas de detección del coronavirus a diario, de las cuales unas 30 son rápidas y las 120 restantes de tipo PCR en sus dos modalidades, mediante muestras de saliva o nasofaríngeas.
Antes de realizar una prueba, las personas deben ser evaluadas para determinar si son aptos para realizarse el estudio.

Este procedimiento médico, que combina un examen físico con uno testimonial, se lleva a cabo en una carpa a la que acuden todos los días decenas de personas para averiguar si contrajeron el coronavirus.

Otros servicios continúan. El director médico del hospital, Francisco Torres Lebrón, explicó que se mantiene intacto el resto de servicios de salud que ofrecen.
Además, el galeno exhortó a la ciudadanía a no descuidar los padecimientos crónicos, en especial con la toma de medicamentos para tratarlos.