Es de gran valor que el Servicio Nacional de Salud se disponga a abrir diez nuevas unidades de pie diabético en igual número de provincias, eso ayudará bastante
En la Unidad Unidad Integral de Atención al Pie Diabético del Hospital Docente Francisco Moscoso Puello se reciben cada día entre 80 a 100 pacientes con la complicación.
De esa cifra, hasta 20 pacientes son nuevos, aseguró la doctora Paola Chahín, residente del programa de Residencia Médica de Pie Diabético de la principal unidad de atención integral de la red pública. Se trata, dijo la médico residente, de una complicación que se ha convertido en una epidemia que complica la vida de las familias más pobres. Los pacientes que llegan a la unidad proceden de todo el país.
Además de la del Moscoso Puello, sólo existe una unidad en Santiago, en el hospital José María Cabral y Báez y un servicio de cura en el hospital Marcelino Vélez Santana , en Herrera.
La situación es de tal preocupación que las camas del Francisco Moscoso Puello se mantienen ocupadas, dijo la cirujana.
La médica destacó la alta humanización y sensibilidad del personal de salud hacia los pacientes con esa complicación de salud.
Relevante
La residente de cirugía especializada en complicaciones diabéticas dijo que el número de pacientes que asiste a la unidad va a en crecimiento.
En esa misma unidad existe un área que es especializada en la aplicación del tratamiento del Factor de Crecimiento Epidérmico que utilizan con mucho éxito tanto en la unidad del hospital Moscoso Puello. Ese tratamiento también se aplica en la unidad del hospital José María Cabral y Báez, de Santiago.
La demanda
La médica explica que la mayor dificultad se presenta al equipo de salud es cuando alguien necesita internamiento debido a que la capacidad de camas está casi siempre. Los pacientes se ingresan ante una complicación agravada o ante la necesidad de ir a quirófano. Una ventaja que refiere es que el proceso de egreso de los pacientes es también rápido, insiste.
Nuevas unidades
Dijo que es importante que esos servicios especializados se expandan a diferentes provincias del país, debido que un día que pierda un paciente con pie diabético para recibir el tratamiento, puede implicar un antes y un después para su recuperación.
“Tratamos de dar el tratamiento quirúrgico lo más rápido posible para poder liberar esa cama, porque siempre hay una lista muy larga de pacientes que necesitan ser ingresados”, dijo la profesional.