El jardinero Manuel Mota comenzó a jugar en el béisbol profesional dominicano en la temporada 1957-1958 con el equipo de los Leones del Escogido, en donde comenzó a demostrar su talento en el terreno de juego.

En la temporada de 1960-1961 pasó al equipo de los Tigres del Licey, en donde logró sus mejores resultados como jugador nativo.

En ese mismo primer año con los bengaleses se alzó con el título de bateo al batear para .344. Despachó 67 imparables en 195 turnos al bate.

Pero no se detuvo ahí, ya que en las dos próximas campañas también ganó el campeonato de bateo con .379 y .364, respectivamente.

Durante 713 partidos jugados, conectó 800 imparables, entre ellos 78 dobles, 41 triples y nueve cuadrangulares para un promedio de .332.
Él finalizó la carrera con 880 hits 85to de por vida), además de segundo en triples con 41, superado por los 43 de Luis Polonia.

Luego de su estelar actuación como jugador se dedicó a la dirigencia logrando importantes logros en el béisbol profesional de la República Dominicana, tanto en el país como en el extranjero, especialmente en la Serie del Caribe.

La Serie del Caribe de 1971 fue bautizada con el nombre de Manuel Mota, pues se convirtió en el gobernador de San Juan de Puerto Rico, donde se llevó los honores como jugador y manager en la justa deportiva.

Con su actuación, Mota le dio la primera victoria a los Tigres del Licey y la República Dominicana, en este clásico, teniendo como escenario el estadio de San Juan.
No hay duda que fue todo una estrella con los azules.