Según la Dirección General de impuestos internos en la República Dominicana existe un parque vehicular de 3, 612,964 unidades de este total el 53% son Motocicletas, partiendo de estos datos pudiéramos decir que en el país existen más de un millón y medio de Motocicletas en todo el país.

Sin embargo, es evidente ver el crecimiento desproporcionado y carente de regulación de los llamados MOTOCONCHO el cual se han convertido  en el principal medio de transporte en República Dominicana, debido a la deficiencia  que ha mostrado el principal organismo gubernamental llamado a ofrecer un servicio de calidad como es el caso de la OFICINA DE SERVICIOS DE AUTOBUSES ( OMSA ) que mientras más Autobuses recibe más deficiente es el servicio.

La falta de rutas interurbanas que permitan el acceso a los distintos barrios del país, ha permitido el crecimiento de manera exponencial el sector del MOTOCONCHO que de estar regulado por el estado pudiera aportar recursos al País.

Si algo deja  claro todo esta situación es la falta de voluntad política de las autoridades por regular este sector, esto trae como consecuencia que la Motocicleta se convierta , de un instrumento noble de trabajo, de creación de empleos, a herramienta por excelencia como medio de transporte para  cometer actos delictivos.

En alto porcentaje de atraco o asalto está envuelta una motocicleta, las autoridades dominicanas no posee estadísticas confiables con relación a la cantidad  real de Motocicletas que circulan en las calles del país como quien las poseen, quien conduce y a nombre de quien se encuentra, estas llegan al país desarmadas lo que no permite generar un registro aduanal adecuado de su cantidad y número de Chasis  lo cual hace fácil circular en ella  sin el debido registro de ley (matricula), a esto agreguemos que el 95% de cada accidente de tránsito en Rep. Dom está involucrada una motocicleta

Se hace necesario que el estado dominicano ponga la mirada hacia este sector ya que en vez de ser parte de la solución al problema del transporte, se está convirtiendo en una perturbación para los dominicanos que circulan por las vías del país.

Es inevitable sentir miedo e inseguridad al ver dos personas en una motocicleta a tu lado  lo que crea una desconfianza, las motocicletas se convertirán en una gracia para algunos y desgracia para otra parte de la sociedad dominicana, en la medida en que las autoridades No presten atención al crecimiento desproporcionado de este sector.

El estado debe aplicar las herramientas de Liderazgo responsable  Información, Autoridad, Eficiencia, transparencia y tecnología