LENOX, Massachusetts, EE.UU..- La talentosa Maureen Stapleton, actriz de reparto ganadora de un Oscar, cuya vulnerabilidad sutil y fortaleza pragmática le mereció numerosos papeles dramáticos y cómicos en las tablas, el cine y la televisión, murió a los 80 años.

Fumadora empedernida, Stapleton, quien residía en Lenox, murió de enfermedad pulmonar crónica, dijo su hijo Daniel Allentuck.

Stapleton, obtuvo un Premio de la Academia en 1981 por su papel secundario como la escritora anarquista Emma Goldman en la película de Warren Beatty “Reds”, sobre un periodista izquierdista estadounidense que viaja a Rusia a cubrir la Revolución bolchevique.

En su momento, Stapleton dijo que para preparase para su actuación intentó leer la autobiografía de Goldman, pero pronto le aburrió y abandonó la lectura.

“Hay muchos caminos que conducen a la buena actuación”, Stapleton, relató en su propia autobiografía publicada en 1995 “Hell of a Life”. “A mi se me ha preguntado varias veces cuál es la clave de la actuación, y para mí, lo principal es que mantener despierto al público”.

Stapleton fue nominada varias veces a un Oscar como actriz de reparto por sus actuaciones en “Lonelyhearts” (su primera película en 1958); “Airport” (1970); y la cinta de Woody Allen “Interiors”, (1978).

Otros de sus créditos fueron el musical de 1963 “Bye Bye Birdie” con Ann-Margret y Dick Van Dyke, “Johnny Dangerously”; “Cocoon”; “The Money Pit” y “Addicted to Love”.

Ganó un premio Emmy en 1967 por “Among the Paths to Eden” y fue nominada varias veces más.

Proveniente de una familia irlandés católica, y con un padre alcohólico, Stapleton dejó su casa en Troy, Nueva York después de graduarse de la escuela. Se mudó a Nueva York donde estudió en la escuela de actuación Herbert Berghof y posteriormente el Actor’s Studio.

Debutó en Broadway en la producción de 1946 de Burgess Meredith de “The Playboy of the Western World”.

A los 24 años su interpretación de Serafina Delle Rose en el éxito teatral de Tennessee Williams “The Rose Tattoo” le mereció un premio Tony. Luego actuó en varias obras más en Broadway, ganando un segundo Tony en 1971 por “The Gingerbread Lady”.

Se casó dos veces, ambos matrimonios fracasaron, y también enfrentó problemas con la bebida. Stapleton tuvo dos hijos.

Además de Allentuck, a Stapleton le sobreviven su hija, Katharine Bambery, y un hermano Jack Stapleton.