Muere el director de orquesta italiano Claudio Abbado a los 80 años

Muere el director de orquesta italiano Claudio Abbado a los 80 años

ROMA. El famoso director de orquesta italiano Claudio Abbado, que dirigió las principales orquestas del mundo, falleció este lunes en Bolonia, en el norte de Italia, a los 80 años de edad, anunciaron sus allegados.

«Lo he sabido por su médico personal», declaró a la AFP Attilia Giuliani, presidenta de la asociación de fans de Claudio Abbado, los «Abbadiani», confirmando el fallecimiento del maestro.   «Claudio Abbado ha fallecido serenamente esta mañana a las 08H30 (07H30 GMT), rodeado de su familia.

Las informaciones sobre su funeral se comunicarán más adelante», señaló por su parte la familia en un breve comunicado.   Abbado, que llevaba varios años enfermo, tenía una imagen de humanista y demócrata, muy alejada del estereotipo del director de orquesta tiránico.

La orquesta Mozart de Bolonia, que dirigía en los últimos años, había suspendido sus conciertos desde hacía unos diez días.   En diciembre, Abbado ya había sido sustituido en la batuta debido a su delicado estado de salud, que se fue degradando desde que fue operado de un cáncer de estómago en el año 2000.

Nacido en una familia de músicos de Milán (norte) el 26 de junio de 1933, Claudio Abbado comenzó sus estudios en su ciudad natal y completó su formación con Hans Swarowsky en Viena a partir de 1957.

Empezó dirigiendo en la Scala de Milán en 1960, donde fue aclamado por su interpretación de la ópera de Giacomo Manzoni «Atomtod» en 1965 y tres años más tarde asumió la dirección del famoso teatro lírico, un cargo que ostentó hasta 1986.

Abbado, de ideología izquierdista, ofreció conciertos en fábricas y escuelas tratando de abrir el mundo de la música clásica. También realizó cientos de grabaciones.

Posteriormente dirigió la London Symphonic Orchestra, fue director de la ópera de Viena y, tras la muerte de Herbert von Karajan, dirigió la Filarmónica de Berlín.

En agosto pasado, Abbado fue hecho senador vitalicio por el presidente de la República italiana, Giorgio Napolitano, y en diciembre anunció que renunciaba a su sueldo parlamentario para dedicarlo a la financiación de becas para jóvenes músicos.

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