SAN SALVADOR.- AP
El expresidente salvadoreño Mauricio Funes, que llegó a la política tras una carrera como periodista que denunciaba irregularidades y que pasó sus últimos años exiliado en Nicaragua para evitar cumplir varias condenas por corrupción y negociar con pandillas, murió el martes por la noche. Tenía 65 años.
El Ministerio de Salud nicaragüense confirmó en un comunicado el fallecimiento, que atribuyó a “su grave dolencia crónica”.
Por su parte el Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua informó el miércoles que la familia y amigos del expresidente decidieron celebrar su ceremonia fúnebre en territorio nicaragüense y agradeció al gobierno de El Salvador porque «en todo momento hizo patente su disposición humanista y solidaria con los familiares”.
Funes gobernó El Salvador desde 2009 hasta 2014, pero murió en Nicaragua, donde vivió exiliado los últimos nueve años bajo la protección del gobierno de Daniel Ortega. Le fue concedida la nacionalidad nicaragüense para evitar ser extraditado y enfrentar a la justicia por los delitos que le imputaban en El Salvador. Recibió varias condenas por las que acumuló 28 años de prisión, pero nunca pisó la cárcel.
Llegó a la presidencia de la mano del exguerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), un partido hoy opositor al gobierno.