Hoy 
Luis Duarte, de 66 años, llegó al hospital Moscoso Puello aquejado de males cardíacos y fue internado en la sala de cuidados intensivos. Pero ayer murió de síntomas de cólera. En el recuadro, su viuda Ada Rodríguez llora y reclama.
Murió ayer aparentemente de cólera, en el hospital Francisco Moscoso Puello, un hombre de 66 años, con lo que suman cuatro los fallecidos en los últimos cinco días, en tanto 110 pacientes eran atendidos en los principales centros de Santo Domingo, San Pedro de Macorís y Monte Plata.
La víctima es Luis Duarte, residente en la calle Aurora del barrio Capotillo, quien fue ingresado el viernes con síntomas de la enfermedad, luego de permanecer en cuidados intensivos por enfermedades relacionadas con el corazón.
Su esposa, Ada Rodríguez, lloraba frente a la unidad de cólera a la espera de que bajaran el cadáver de su compañero.
Su dolor era doble por considerar que a Duarte no lo trataron como era debido y murió sentado en una silla en la unidad de cólera a pesar de la enfermedad de base que tenía.
El sufría del corazón, por qué no lo tenían en una cama si estaba primero en cuidados intensivos, exclamó sollozando Rodríguez.
La información de la muerte de Duarte se produjo una hora después de que el ministro de Salud Pública, Bautista Rojas Gómez, pasara por la unidad de cólera del citado hospital, como parte de un recorrido que hizo ayer por diversos centros.
Fuera de las unidades de cólera familiares reclamaban separar los enfermos hasta que se compruebe la enfermedad, tras considerar que los sanos se contagian con los afectados.
Millones para cólera. La Presidencia de la República dispuso de 30 millones de pesos mensuales sólo para atender el cólera en los hospitales públicos, por lo que estos centros no gastan un centavo en el tratamiento de esta enfermedad.
Así lo informó Rojas Gómez luego de iniciar los trabajos de readecuación de espacios físicos en los hospitales públicos que reciben pacientes sospechosos de la enfermedad.
La reparación de esas áreas tiene la finalidad de evitar que los pacientes se constituyan en potenciales vías de contagio para aquellos que padecen de otros males.
Las autoridades ubican lugares especiales fuera de las salas tradicionales de los hospitales para ser destinados al tratamiento de personas con síntomas de cólera, ya que se espera que la enfermedad permanezca por varios años en el país, tras su aparición en Haití el año pasado.
Bajo control
Bautista Rojas Gómez afirmó, por otra parte, que dan buenos resultados las medidas de prevención que se toman en todo el país, por lo que, dijo, el cólera se encuentra bajo control. Puso como ejemplo los barrios La Ciénaga y La Puya, en el Distrito Nacional, donde ha habido una baja considerable en la prevalencia, lo que atribuyó al involucramiento de la comunidad a través de sus organizaciones sociales.
