Una deficiencia del sistema de salud cobró ayer la vida del niño Franklyn Morillo, de siete años de edad, quien falleció de rabia humana, tras 16 días de agonía.

A pocas horas del desenlace fatal del caso del niño Morillo, otra madre pidió a las autoridades que traigan vacunas al país, pues su hijo de 20 años fue mordido por un perro el pasado domingo y en el centro Antirrábico le dicen que no hay vacunas.

La intervención inmediata del secretario de Salud Pública  permitirá que ese joven sea vacunado en la mañana de hoy.

Con respecto al menor, oriundo del barrio Simón Bolívar,  norte de Santo Domingo, su propia pediatra definió el caso como un fallo del sistema de salud.

El menor pasó por tres hospitales y no fue diagnosticado con rabia, dijo la doctora Josefina Fernández, pediatra infectóloga.

Morillo fue mordido por un perro a mediados  de agosto, pero fue ingresado en el hospital Robert Reid Cabral hace 17 días.

Su drama se volvió crítico, pues le fue inducido el estado de coma para poder aplicarle los fármacos y revisar si lograba generar anticuerpos.

El menor falleció a las 3:30 de la madrugada  de ayer (martes). Es hasta ahora  el paciente  que más tiempo ha permanecido recibiendo terapia y en coma inducido.

El pequeño Morillo fue tratado con la terapia o método de Milwaukee, la cual  consiste en poner en reposo absoluto al paciente para luego aplicarle el tratamiento que buscaría de revertir la situación.

Este año se han registrado en el país tres casos de rabia humana.

Mientras tanto, las autoridades sanitarias informaron que iniciaron un proceso para vacunar a más de un millón de perros y gatos en todo el territorio nacional.

No hay vacunas

“El centro Antirrábico no tiene vacunas y temo que mi hijo muera, pues fue mordido por un perro realengo”, denunció ayer la ingeniera Margarita  Ceballos.

La madre entró en pánico, pues su hijo fue mordido por el canino el pasado domingo, pero el propio director del Centro Antirrábico le dijo que no disponen de los biológicos, según ella contó  a HOY.

El niño Franklyn Morillo, de siete años de edad, murió ayer en el hospital infantil Robert Reid Cabral y eso aumentó el pánico de la madre.

La ingeniera Ceballos, quien vive en el residencial Paloma María, de Bayona, se preguntaba si tendría que sentarse a esperar a que su hijo muera, pues ella no tiene forma de supervisar al perro que mordió a su vástago Sergio Taveras, de veinte años de edad.

El secretario de Salud Pública, Bautista  Rojas Gómez, la contactó personalmente y será vacunado hoy.

Versión oficial

Las autoridades de Salud Pública insisten en que hay vacunas en la República Dominicana. Señalan, incluso, que tomaron vacunas prestadas a Ecuador.

Aseguran que han vacunado cerca de 400,000 perros y gatos y resaltaron que tienen en agenda la vacunación de otro millón de animales.

Las autoridades tomarán medidas directas desde el Centro Antirrábico, donde se informaba ayer que no hay vacunas.