LA HABANA (AP).- El veterano disidente Gustavo Arcos Bergnes, uno de los primeros seguidores del presidente Fidel Castro a cuyo gobierno sirvió incluso como embajador antes de ser arrestado por sus actividades contrarrevolucionarias, murió el martes a los 79 años, informaron sus vecinos.

Arcos había ingresado en el hospital Calixto García en semanas anteriores por una insuficiencia renal y neumonía, pero fue dado de alta antes de morir. «No será velado, lo cremarán’’, dijo a la AP con incontenible voz llorosa al teléfono, Clara Villar, quien habita la misma casa de vecindad, donde vivía el opositor. Un contacto telefónico con la funeraria confirmó la versión de la vecina.

«Lo he sentido mucho, lo quería y lo admiraba también’’, comentó Villar. Consultado sobre el deceso, el opositor Carlos Menéndez de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional aseguró que Arcos habría fallecido debido a un paro cardíaco sobre las 11.30 del martes.

«Era una persona muy importante para el movimiento disidente, moral, desinteresado y valiente’’, comentó Menéndez. Su esposa Teresa no pudo ser localizada inmediatamente.

En cambio su amiga Hilda Molina, lo definió como «un hombre honesto y de gran cultura’’. «El era un patriota’’, agregó.

Arcos, nació el 19 de diciembre de 1926 en Caibarien al centro de la isla, y estudiaba para diplomático en la Universidad de La Habana cuando se encontró con Castro.