Muere una  cubana en  incidente

Muere una  cubana en  incidente

MIAMI, (AFP) – Una inmigrante ilegal cubana murió y otros cuatro resultaron heridos este sábado en un incidente entre traficantes de inmigrantes y la Guardia Costera (GC) estadounidense al sur de Florida que es investigado por las autoridades, informó la rama armada.

En el incidente los guardias costeros dispararon en dos ocasiones contra una lancha con 31 inmigrantes cubanos y tres traficantes a bordo para dañar sus motores, y aseguró que “ningún inmigrante resultó herido por el fuego”, dijo a la AFP Dana Warr, portavoz de la fuerza armada.

Según la GC, el hecho se registró el sábado por la madrugada cuando una nave de esa fuerza interceptó una lancha con las 34 personas a bordo en los cayos del sur de Florida, y le dio un alto que fue ignorado por los traficantes.

Tras una persecución en la cual los traficantes supuestamente “intentaron chocar contra la nave de la Guardia Costera más de cinco veces”, un agente “disparó dos veces contra uno de los motores” de la lancha, inmovilizándola, dijo Warr.

Al abordar la lancha los agentes hallaron a una mujer con severos golpes en la cara y en la cabeza, quien fue trasladada a una clínica en Key West (el más sureño de los cayos) y murió camino al lugar.

Otra mujer, embarazada, fue trasladada a un lugar no precisado quejándose de dolores abdominales, y tres hombres con heridas menores fueron atendidos en un barco de la GC, donde aún permanecen. El jefe de fiscales federales en Miami, Alexander Acosta, dijo que investigará los hechos para fijar responsabilidades. “En meses recientes nuestra comunidad ha sido testigo de varios incidentes.

 donde traficantes pusieron en peligro las vidas de inmigrantes. Hoy se perdió otra vida (…) Esto tiene que parar”, dijo Acosta en un comunicado.

En marzo pasado dos traficantes de inmigrantes fueron condenados a 10 años de cárcel por el viaje que provocó la muerte de un niño cubano de seis años cerca de las costas de Florida en octubre.

Por ese caso los gobiernos de Cuba y Estados Unidos se culparon mutuamente, por sus respectivas políticas migratorias.

Cuba sostiene que Estados Unidos propicia el tráfico al favorecer la inmigración ilegal cubana, y Estados Unidos acusa a Cuba de impulsar el éxodo de sus ciudadanos porque viola sus derechos humanos.

Estados Unidos permite a los ilegales cubanos que lleguen a sus costas quedarse en el país -a diferencia de los inmigrantes de otros países-, pero devuelve a quienes hayan sido interceptados en el mar.

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