México, (AP).-Diez pistoleros y un soldado murieron el domingo en un enfrentamiento en el sur de México, indicaron las autoridades.

Otro soldado, un agente federal y un policía estatal resultaron heridos en la confrontación en el poblado de Arcelia, en el estado de Guerrero, indicó el departamento estatal de Seguridad Pública en un comunicado.

El texto indicó que el tiroteo entre los soldados y la policía con un grupo de pistoleros que se desplazaban en 10 automóviles fue posterior a una balacera entre dos grupos delictivos rivales que dejó un muerto.

Un grupo de soldados, así como policías estatales y locales fueron atacados cuando buscaban a los responsables de la balacera.

En otro incidente violento el domingo, seis personas fueron asesinadas cuando atacantes dispararon dentro de un salón de billar en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez, ubicada frente a El Paso, Texas.

Alejandro Pariente, portavoz de la procuraduría del estado de Chihuahua, dijo que los investigadores recuperaron más de 50 casquillos de bala en el lugar.

En el estado de Michoacán, agobiado por hechos de violencia, un grupo de soldados halló por lo menos ocho cuerpos en una tumba poco profunda, informaron las autoridades el domingo.

Los cadáveres estaban cortados en piezas y quemados, indicó la Secretaría de la Defensa en un comunicado.

Los soldados encontraron los restos el sábado en el patio de una casa en las afueras de la ciudad de Uruapan. También hallaron dos hachas de mano, un cuchillo, armas, granadas, esposas y pasamontañas dentro de una cisterna cerca de los cuerpos.

Por otro lado, en el estado fronterizo de Baja California, la policía arrestó a 15 presuntos sicarios del cártel de Sinaloa.

El líder de la célula, Víctor Serrano, fue detenido el sábado en una clínica en el vecino estado de Sonora, donde era atendido por una herida de bala que recibió en un tiroteo el viernes, dijo Rommel Moreno, procurador general de Baja California. Posteriormente fue trasladado por avión a la Ciudad de México para ser interrogado.

El procurador dijo que las autoridades buscaban a la célula por cuando menos 20 homicidios en Baja California.

Las organizaciones de narcotraficantes han sido acusadas de haber cometido más de 4.000 asesinatos en lo que va del 2008. Han dejado un sendero particularmente sangriento en Michoacán, el estado natal del presidente Felipe Calderón, así como en Baja California.