BAGDAD,  (EFE).- Al menos 18 personas murieron y 53 resultaron heridas en varios ataques y enfrentamientos que tuvieron lugar hoy en Irak, según fuentes policiales, mientras que el Ejército de Estados Unidos confirmó la muerte de otros tres soldados en diversos incidentes. El suceso más grave dejó cinco muertos y otros 37 heridos cuando un grupo de desconocidos lanzó varios proyectiles de mortero contra un mercado popular en el barrio Al Bayaa, en el sur de Bagdad.

La fuente explicó que el ataque coincidió con el estallido de un coche bomba en ese mismo mercado.

También en Al Bayaa, dos personas murieron y otras seis resultaron heridas en un segundo ataque con morteros contra una zona residencial.

Además, un grupo de desconocidos lanzó otra bomba de mortero contra la fortificada “zona verde” de Bagdad que causó daños materiales.

Esa zona es uno de los lugares más protegidos de Irak y acoge varios edificios gubernamentales, además de las embajadas de EEUU y el Reino Unido.

En un suceso distinto, dos civiles perdieron la vida y otros cinco resultaron heridos cuando un helicóptero militar norteamericano atacó una gasolinera en Ciudad Sadr, en el este de la capital.

Por otro lado, cinco “terroristas” murieron en una redada efectuada por una fuerza conjunta de los ejércitos de EEUU e Irak en Ciudad Sadr en la que también fue arrestado un supuesto cabecilla de un grupo armado acusado de introducir armas iraníes en Irak.

En la ciudad meridional de Basora, cuatro milicianos chiíes murieron y otros cuatro sufrieron heridas esta madrugada en combates con el Ejército británico, según la agencia de noticias iraquí Aswat al Irak (Voces de Irak).

Nada de reducir las tropas

 WASHINGTON,  (AFP) – La Casa Blanca dijo ayer que es prematuro hablar de reducir las tropas en Irak después de que el diario The New York Times asegurara que la administración estadounidense consideraba un recorte drástico de sus fuerzas en territorio iraquí para 2008.

 «La idea es completar la misión, y mantener la estrategia actual, y cualquier decisión futura sobre la cantidad de fuerzas será tomada por el presidente”, dijo un portavoz de la  Casa Blanca.