BAGDAD (EFE).- Cerca de 30 personas murieron el domingo en Irak, incluidos siete soldados de EEUU, y más de 200 resultaron heridas, en una de las jornadas más sangrientas que ha vivido este país desde que el presidente estadounidense George W. Bush anunciara en mayo el final de los combates a gran escala.

El principal escenario de los conflictos fue la ciudad de Nayaf, donde radicales chiítas y tropas de la coalición libraron sangrientos enfrentamientos y fue atacada la base de las tropas española «Al Andalus»

Fuentes hospitalarias en Nayaf confirmaron que al menos 20 iraquíes perdieron la vida y otros 200 resultaron heridos en los choques con fuerzas de la coalición en esta ciudad, 180 kilómetros al sur de Bagdad.

La atmósfera de tensión que se vivió ayer en Nayaf la ilustra los testimonios de testigos presenciales, según los cuales grupos de milicianos incitaron a los niños a bloquear las calles de acceso a la base de «Al Andalus» y a preparar barricadas desde las que poder efectuar acciones violentas contra las tropas.

«La ciudad está llena de milicianos del Ejército del Mahdi (del líder radical chiíta Muqtada al Sadr) y han venido a luchar», aseguró a EFE Ali Husein, un habitante de Nayaf mientras escapaba del tiroteo.

Poco después del mediodía comenzó un intercambio de disparos entre fuerzas españolas del destacamento «Al Andalus», una pequeña agrupación de ayuda cívico-militar que cuenta con unos 70 integrantes.

Los participantes en la protesta reclamaban la puesta en libertad del clérigo Mustafa Yaqubi, el «número dos» del líder chiíta radical Múqtada Sadr, quien según ellos estaba detenido y bajo custodia de las fuerzas españolas, extremo desmentido por los portavoces de las tropas españolas.

Al final del tiroteo, y tras la intervención helicópteros de combate estadounidenses que apoyaron con su fuego la defensa de la agrupación española un soldado salvadoreño y otro estadounidense perdieron la vida.

Otro de los incidentes mas sangrientos tuvo lugar en Bagdad donde siete soldados estadounidenses murieron y más de una veintena resultaron heridos en un combate callejero entablado al caer la tarde con milicianos de las «Brigadas del Mahdi», brazo armado del clérigo radical chiíta Muqtada Sadr.

Fuentes militares estadounidenses confirmaron que sus soldados, adscritos a un batallón de la Policía militar, perecieron en un tiroteo cuando trataban de retomar el control de una comisaría asaltada por los milicianos.

El líder radical chiíta Muqtada al Sadr pidió a sus seguidores, tras los sangrientos incidentes, que dejen las manifestaciones y que utilicen medios más efectivos para «aterrorizar al enemigo».

El gobierno de Estados Unidos por su parte aseguro, a través de un portavoz en Washington que el traspaso de poder en Irak tendrá lugar el próximo 30 de junio, y que permanecerá allí hasta la instauración de un régimen democrático y la pacificación del país.

[b]Primera víctima latina, piden tropas regresen[/b]

Un organismo de derechos humanos y el ex guerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN, izquierda) pidieron ayer el «retorno inmediato» de las tropas enviadas por El Salvador a Irak, luego de un ataque que costó la vida a un soldado salvadoreño y heridas a otros.

Las tropas salvadoreñas forman parte de la brigada «Plus Ultra», la cual está formada además por tropas hondureñas, nicaraguense y dominicanas.

Es la primera vícitima mortal latinoamericana que cae en la ivasión a Irak.

El presidente Francisco Flores lamentó la muerte del soldado y subrayó en un comunicado que «acciones violentas e irracionales como este ataque demuestran la necesidad de la presencia de la comunidad internacional en el proceso de reconstrucción de Irak».

Sin embargo, Flores evitó referirse directamente a la petición para que las tropas retornen.

[b]Refuerzan seguridad Nayaf[/b]

Las tropas de ocupación estadounidenses han comenzado a desplegar una gran cantidad de soldados en la ciudad de Nayaf, escenario ayer de los peores enfrentamientos desde el inicio de la invasión, hace un año, entre radicales chiíes y las tropas de la Coalición.

Pese a que el mando en la ciudad está asignado a la División multinacional Centro-Sur, que dirige Polonia, un convoy con casi una veintena de vehículos militares estadounidenses entró en la ciudad por la carretera que la une con la localidad de Kerbala, a unos 890 kilómetros al sur de Bagdad.