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SAN SALVADOR (AFP).- Al menos 37 personas, miembros de una iglesia evangélica, murieron y 24 más resultaron heridas este sábado al accidentarse un autobús que se precipitó en una barranca cerca de Carolina, 167 km al este de San Salvador, informó una fuente oficial.
«A este momento sobrepasan las 37 víctimas (mortales) a pesar que habíamos destacado medios de socorro», declaró la vicepresidenta salvadoreña Ana Vilma Alvanez, quien realizó un recorrido por los hospitales capitalinos y se presentó a un improvisado helipuerto a observar el traslado de pacientes graves.
«Cómo perdemos salvadoreños en lo que es el tráfico (vehicular)», agregó.
Alvanez, presidenta en funciones debido a la ausencia del presidente Elías Antonio Saca, que se encuentra en Taiwán, calificó el accidente de «tragedia nacional».
«Estamos impactados sufriendo por esta nueva tragedia, que afecta a la familia salvadoreña», subrayó.
En un balance inicial, la portavoz de la Policía Nacional Civil (PNC) América Ortiz, había asegurado que los muertos ascendían a 35, entre estos siete niños.
Otras 26 personas, entre ellas niños, fueron internados en hospitales de las vecinas Ciudad Barrios y San Miguel, pero los más graves fueron trasladados en helicópteros de la PNC a la capital San Salvador, señaló la informante. De esos 26 heridos dos fallecieron, elevando a 37 las defunciones.
En la capital, los hospitales Benjamín Bloom y Rosales fueron declarados en emergencia para atender a los pacientes.
Tras aterrizar un helicóptero de la PNC en un improvisado helipuerto, cinco niños fueron trasladados en ambulancias al hospital Bloom, especializado en infantes, donde se podía observar un intenso movimiento de médicos y enfermeras.
El accidente se produjo poco después de las 08H00 locales (14H00 GMT) cuando el autobús por causas ignoradas se precipitó a la barranca, de unos cien metros, a tres kilómetros de Carolina, precisó Ortiz.
Testigos dijeron a estaciones de radio que el percance pudo haber ocurrido por «la imprudencia» del chofer, que desconocía las prolongadas curvas de la carretera que lleva a Carolina.
Según la Policía, el autobús iba sobrecargado y el chofer conducía a excesiva velocidad cuando perdió el control de la unidad a la altura del lugar conocido como El Nacaspilo.
Organismos de socorro y unidades policiales se desplazaron al lugar para rescatar de entre los restos a los heridos y los cadáveres; misión dificultada por lo agreste de la zona.
El autobús había salido del vecino municipio de Guatajiagua con personas pertenecientes a una iglesia evangélica y se dirigía a un lugar turístico de la zona con el fin de realizar «un culto», indicó la fuente.
Un corresponsal de la radio local YSKl identificó al pastor organizador de la fatídica excursión como José Antonio Avilés, quien también falleció.
La vicepresidenta salvadoreña, aseguró que un grupo de médicos forenses trabajan en la identificación de las víctimas y luego el gobierno estará presto a proporcionar «atención» a los familiares de los deudos, en virtud que por ser de escasos recursos económicos, necesitaran ayuda para cubrir gastos funerarios.
