Al menos 77 civiles, entre ellos 20 niños, murieron este lunes en bombardeos del régimen sirio en Guta Oriental, un bastión rebelde cerca de Damasco, donde la llegada de nuevas tropas augura una ofensiva terrestre inminente informó el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH). «El régimen bombardea intensamente Guta Oriental en vistas a una ofensiva terrestre», dijo a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman. La ONG también dió cuenta de unos 300 heridos durante los ataques realizados por la fuerza aérea siria y por la artillería desplegada en torno del enclave. Según el OSDH, 20 civiles perecieron en los ataques del lunes en Hamuria y otros nueve en Saqba. El resto murieron en otras zonas bombardeadas.
Esta oenegé había dado un anterior balance de 54 civiles muertos. Por su parte la ONU pidió el cese «inmediato» de los bombardeos de la aviación siria el lunes en el enclave rebelde de Guta. «La situación humanitaria de los civiles en Guta oriental está totalmente fuera de control», afirmó en un comunicado difundido en Beirut Panos Moumtzis, coordinador de la ONU para la ayuda humanitaria en Siria.
«Es imperativo poner fin de inmediato a este sufrimiento humano insensato», añadió.