NAHR AL BARED, Líbano, (AFP).- El ejército libanés bombardeó ayer a los milicianos de Fatah al Islam, atrincherados en el campo de refugiados palestinos de Nahr al Bared, en el norte de Líbano, en una ofensiva considerada crucial en la que murieron dos soldados.

 Ambos soldados murieron en enfrentamientos violentos alrededor de Nahr al Bared, indicó en Beirut un portavoz militar.

 «Si no fuera por los civiles, podríamos haber rematado nuestra misión en dos horas», aseguró el portavoz, quien añadió que el ejército estaba «limpiando zonas alrededor del campo y reforzando su control en los sectores tomados el viernes».

 El ejército, que se reforzó en los alrededores del campo el viernes en medio de mortíferos combates, bombardeaba las posiciones de los combatientes islamistas con cañones de 155 milímetros instalados ante las entradas de la parte este del campo, según un corresponsal de la AFP.

 El diario francófono L’Orient-Le Jour aseguraba este sábado, citando a responsables, que «el asalto final debería realizarse en 48 horas».

 Para el diario An Nahar, «el ejército ha lanzado la batalla decisiva; Fatah al Islam está a punto de derrumbarse».

 En el campo se encuentran aún unos 5.000 refugiados palestinos, tras la huida de otros 25.000, que han hallado cobijo en el campo vecino de Baddaui y en las regiones cercanas.

 Los combates habían perdido intensidad durante la noche, tras un día marcado por los violentos enfrentamientos en los que el ejército perdió a tres soldados y aseguró haber avanzado hacia la parte noroeste del campo, donde dice que se concentra el grueso de los combatientes. El ejército libanés negó sin embargo haber penetrado ya en el campo.  El ejército se ha dicho determinado a continuar sus operaciones.