Mujer admite asesinó por  asfixia  8 hijos recién nacidos

Mujer admite asesinó por  asfixia  8 hijos recién nacidos

VILLERS-AU-TERTRE.  Francia.  AP. Una francesa que admitió haber sofocado a ocho de sus recién nacidos y de ocultar sus cadáveres en el jardín y garaje de su casa fue acusada de homicidio, dijo un fiscal ayer, jueves.

Dominique Cottrez, una enfermera asistente de 46 años de edad, alegó que después de una mala experiencia en su primer embarazo nunca quiso volver a ver a un médico.

Admitió haber dado a luz por su cuenta y colocado los cuerpos en bolsas de plástico. Enterró a dos en el jardín y ocultó el resto en el garaje, precisó el fiscal Eric Vaillant.

«Ella explicó que no quería más hijos y que no quería ver a un médico para tomar anticonceptivos», dijo Vaillant en una conferencia de prensa. «Estaba perfectamente consciente de estar embarazada en cada ocasión».

La mujer y su marido, Pierre-Marie Cottrez, fueron detenidos el miércoles después que los nuevos propietarios hallaron dos cuerpos en bolsas de plástico enterrados en el jardín de una casa que había pertenecido al padre de la mujer en Villers-au-Tertre, en el norte de Francia.

Bajo interrogatorio, la mujer admitió que había otros seis cadáveres y dijo a los investigadores que se encontraban en bolsas de plástico en el garaje de su casa, donde fueron hallados.

La mujer será sometida a exámenes siquiátricos, dijo el fiscal. El marido quedó en libertad y no ha sido acusado, aunque sigue bajo control judicial.

El hombre dijo no haber sabido nada sobre los embarazos de su mujer, que al parecer podía ocultarlo porque es voluminosa. Poco antes, Vaillant anticipó que el marido podría ser acusado de no reportar un crimen y ocultamiento de cadáveres.

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Historia macabra

Ocho velas encendidas se consumen en un altar improvisado delante de la casa de este pueblo del norte francés, cada una por cada recién nacido sofocado por su madre a sólo horas de haber dado a luz, una macabra historia que horroriza a los habitantes de la localidad.   Villers-au-Tertre es un pueblo en el que «nunca pasa nada», reconoce el alcalde, Patrick Mercier.  Pero el jueves, la vida de este pueblo cambió por completo al enterarse de este hecho.

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