Altagracia Toribio Rodríguez, de 52 años, a quien conocen como Elba en la comunidad Rancho Arriba de Río Grande, está vivita y coleando, como dice el refranero popular, pero en los registros de la Junta Central Electoral (JCE) aparece en la lista de los fallecidos desde el 2006.

Viuda, madre de tres hijos y aún con fuerzas para trabajar, Toribio Rodríguez se encuentra literalmente de manos atadas porque, aunque para su familia y para la barriada está viva físicamente, ante la ley está muerta. “Mi madre tiene su cédula de identidad y electoral vencida desde el 2006 y cuando acude a hacer el cambio a la Junta aparece en el acta de defunción. Ella llega viva a la Junta pero cuando la buscan en los libros está muerta, realmente no entiendo la razón”, explica su hija Alex Estephany Hernández.

Dijo que por la falta del documento civil su progenitora no puede buscar trabajo, no califica para los programas sociales del Gobierno pero tampoco puede ser incluida por uno de sus hijos en el seguro médico.

Manifestó que su madre ha acudido varias veces a la JCE en Santo Domingo pero hasta la fecha no ha podido resolver el problema.

“Mi madre está pasando una situación difícil de salud con problemas de hipertensión y en un brazo que necesita ser atendida, pero por carecer de la cédula no podemos llevarla a un centro médico privado y también tenemos inconvenientes para ingresarla en un hospital”, afirmó.

Hernández hizo un llamado a las autoridades de la JCE para que corrijan el error en el registro civil porque Toribio Rodríguez apenas puede realizar trabajos domésticos y labores informales. El número de la familia es el 829-771-0218.