BAGDAD. AP. Una mujer suicida hizo estallar ayer los explosivos que llevaba amarrados a su cuerpo en medio de un grupo de peregrinos en un santuario chií del norte de Bagdad, matando a por lo menos a 38 personas e hiriendo a 72, dijo el ejército de Irak. 

De acuerdo con el ejército iraquí, la atacante se inmoló a poca distancia de la mezquita del imán Musa al-Kazim, uno de los mayores santos del islamismo chiíta. Entre las víctimas habría varios peregrinos iraníes.

Las autoridades temen que el número de muertos se incremente. Las fuentes pidieron no ser identificadas, al no estar autorizadas a dar información a los medios. 

El ataque de ayer ocurre mientras los chiítas se preparan para celebrar el miércoles la Ashura, una de las fechas más importantes del islam que marca la muerte del nieto del profeta Mahoma, el imán Hussein. La oficina del vocero del ejército de Irak, general Qassim al-Moussawi, dijo que una mujer que llevaba un chaleco con explosivos fue responsable por el ataque.