En los últimos cuatro años, el Museo de las Casas Reales se reafirma, no sólo como la mayor instancia museística de la Zona Colonial de Santo Domingo, sino también como uno de los espacios más abiertos y dinámicos del circuito cultural metropolitano. Dirigido con efectividad y entusiasmo cautivador por la Dra. Ana Yee de Kury, al MCR, con un programa de actividades culturales, sociales y exposiciones artísticas que sorprende por su variedad temática y amplia capacidad de contenidos, le ha tocado llenar el terrible vacío que nos dejara la desaparición de las nueve salas de exposiciones que tuvo en su última etapa la siempre y tristemente añorada Casa de Bastidas.

La exitosa gestión que se reconoce al MCR se debe, igualmente, entre otras razones, a los técnicos y profesionales que asumen día a día su labor, enfrentando las precariedades propias de las instituciones culturales oficiales con admirable entrega, pasión y creatividad, entre ellos algunos de reconocida trayectoria en su especialidad como la museóloga Ingrid González y el escritor y gestor cultural Iván Miura.

Actualmente, el Museo de las Casas Reales mantiene abierta la segunda exposición individual de la artista dominicana Milagros Almonte, titulada Mujeres de tiempo y viento. La misma está compuesta por más de 30 obras pictóricas de medianos y grandes formatos, realizadas en óleo y acrílica sobre tela. El curador de esta muestra, que impone su registro principalmente por la extrañeza de la poética pictórica de Milagros Almonte en el contexto de la plástica dominicana contemporánea, es el reconocido crítico de arte Abil Peralta Agüero, quien encuentra en la obra de la expositora, vínculos estilísticos y filosóficos con la llamada pintura metafísica del surrealista italiano Giorgio de Chirico(1888-1978), así como un dialogo estético e identitario con la obra surrealista y metafísica de maestros dominicanos como Jaime Colson(1901-1975), Jorge Noceda Sánchez, Iván Tovar, Clara Ledesma, José Félix Moya y Félix Brito.

En su penetrante ensayo para el catálogo de Mujeres de tiempo y viento, Abil Peralta Agüero, observa que: En esta nueva colección, Milagros Almonte vuelve a tocar el enigma del vacío y del círculo cuando se refiere a las esferas que vemos en las estructuras figurales de sus pájaros; vuelve a referirse con poder seductivo, sensual, virginal y procreativo a la fruta del plátano, proponiéndonos desde una geometría blanda una organización espacial en la que participan la hoja del plátano, el reloj, la espina y la luz para hablarnos de un arte que se expresa desde el lenguaje metafísico como corriente pictórica asociada a la filosofía, a la teología, a la antropología, a la meditación y a la reflexión sobre el destino final de la humanidad.

Peralta Agüero apunta que desde su primera individual en el Museo de las Casas Reales (2001), la obra de Milagros Almonte atrajo la atención de importantes críticos e historiadores del arte como Laura Gil Fiallo y Cándido Gerón. Precisamente, en su ensayo Milagros Almonte y su aproximación a la naturaleza, el autor de la Enciclopedia de las Artes Plásticas Dominicanas advierte que: La conquista más hermosa y respetable de su arte es la elaboración de la imagen de manera espontánea. Por ello, su lenguaje plástico está dotado de gran belleza. Su estilo tiene un toque muy personal.

Así, Cándido Gerón nos introduce con notable precisión hacia las claves significativas del fresco, calido e imprevisto universo visual personal de Milagros Almonte: Los asuntos preferidos de Milagros Almonte tienen que ver con el paisaje de su tierra, el cual, en sus composiciones plásticas, tiene vida perpétua, donde el colorido se hace más evidente y luminoso. De esa manera, sintetiza un arte de mucha sensibilidad, porque a la artista le fascinan los colores puros y las yuxtaposiciones de tonos complementarios. Como podrá observarse, esta predilección se debe también a sus sentimientos fuertes y transparentes

Se preocupa además por la impresión óptica matizada en sus colores rojos, rosas, morados, azules, verdes, amarillos, ocres, grises, blancos y negros; del mismo modo, hace hincapié en la forma y la representación de la imagen, logrando una composición muy espontánea. Por ello, emula a Maurice de Vlaminck, quien dijo: Trato de pintar con mi corazón y con mis costillas, sin preocuparme por el estilo. Pero también aborda una especie de surrealismo tropical de pinceladas energéticas, de superficies relacionadas con los valores del color. Su apuesta de conos, formas y líneas, muchas veces retorcidas, acentúa el espacio compositivo, haciéndolo más dinámico y de contrastes inesperados

Pero es la propia artista quien mejor expresa con palabras las íntimas motivaciones para la materialización de las obras que integran su segunda muestra individual: Mujeres del tiempo y el viento es un sublime himno a la mujer. Por su grandeza y su incansable lucha en el universo, tratando de ubicarse entre el tiempo y el viento; entre luchas y sueños; entre risas y llantos; entre mañanas y atardeceres; entre el efímero tiempo y la larga espera, buscando su identidad en este mundo mágico

Milagros Almonte es una artista inteligente, con una sólida formación académica y en plena posesión de una actitud ética y vital, cualidades que le han permitido desarrollar su práctica creativa desde la reconcentración en sus búsquedas estéticas y existenciales; desde un ejercicio discreto de la imaginación y desde las arduas jornadas cotidianas de vigilias y fructíferos sueños en su taller. Entre las pinturas de esta muestra que me llevan a pensar que su obra experimenta un interesante proceso de madurez, depuración formal y libertad expresiva que reclama su atento seguimiento, destacan las tituladas La familia, Persecución del tiempo, Hacia una identidad, Piezas del tiempo, así como el ardiente e impactante tríptico Danza del viento(2009).

En síntesis

Milagros Almonte

Es una pintora independiente de la Generación de los 90. Oriunda de Santiago que estudió diseño y decoración en APEC. Tomó clases con Silvano Lora y el cubano Oscar Carballo y se graduó de Artes Plásticas en la UNPHU Entre sus exposiciones destacan: Talla 8, Casa de Bastidas; Exposición Colectiva Egresados de la Escuela de Artes Plásticas Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña(1998); Habitantes del Próximo Milenio-1ra Exposición Individual-, Museo de las Casas Reales(2001); Laberintos Inexplorados en la República Dominicana-exposición colectiva-, Universidad Nacional Autónoma de México; Fantasía y Mitos Caribeños-exposición colectiva-, Galería Zulug, México, D. F.(2002). Es miembro del Colegio Dominicano de Artistas Plásticos (CODAP). La muestra Mujeres de tiempo y viento permanecerá abierta al público hasta el domingo 2 de noviembre en horario de 9:00am a 5:00pm.